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El programa contra el cáncer en Cuba, llevado a cabo por el Ministerio de Salud Pública (Minsap), presentó una estrategia nacional para hacer que este padecimiento reduzca su impacto al nivel de “una enfermedad crónica” común, como la diabetes o la hipertensión.
En el marco del Congreso Mundial contra el Cáncer, que se desarrolla en París, el gobierno cubano propuso su plan de acciones para controlar esta enfermedad con tratamientos menos invasivos que se pueden usar por un largo período de tiempo, recoge Prensa Latina.
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“La pretensión es que el cáncer se convierta en una enfermedad crónica de largo periodo de control, y que las personas puedan vivir muchos años y luego morir de otras causas, como puede suceder con la diabetes o la hipertensión”, explicó la doctora Teresa Romero, jefa del programa contra el cáncer del Ministerio de Salud Pública.
En Cuba se han logrado ensayos clínicos con vacunas terapéuticas de cáncer, “y eso ha sido un logro de los últimos años”, recordó Romero, quien participa en el encuentro junto a tres mil especialistas de unos 110 países.
Según la especialista, la atención primaria que distingue el sistema de salud cubano ayuda al manejo de los enfermos que regresan a sus casas, ya sea para controlar la enfermedad a largo plazo o en caso de que sean necesarios cuidados paliativos si la expectativa de vida es corta.
El Congreso Mundial sobre esta enfermedad se viene celebrando desde el pasado lunes en la capital francesa. La cita se extenderá hasta el jueves en el Palacio de los Congresos en París con el fin de facilitar el intercambio de los conocimientos y prácticas más avanzados para la lucha contra esa enfermedad en el planeta.
El referido foro propiciará la creación de redes internacionales de trabajo y colaboración dirigidas a controlar y erradicar esa enfermedad.
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