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Antes de su esperado estreno en salas de cine colombianas el próximo mes de enero de 2017, La mujer del animal continúa recorriendo el mundo y confirmando el talento creativo de su director Víctor Gaviria.
Luego de su estreno mundial en el 41 del Festival Internacional de Cine de Toronto –TIFF–, su paso por el 11 Festival de Cine de Roma y el reciente Bogotá International Film Festival –BIFF-, ahora, la oportunidad de aquilatar esta producción será para el público asistente al Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, en La Habana.
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La película competirá probablemente en la Selección Oficial de largometrajes de ficción, y seguramente en La Habana tendrá singular impacto esta historia sobre maltrato femenino. La mujer del animal comienza su historia luego de que Amparo es descubierta disfrazándose de Virgen, y huye del internado de monjas donde la acogían. Llega a un barrio marginal de Medellín a vivir de "arrimada" donde su hermana.
Cuando su cuñado la introduce a la familia, el primo Libardo queda infatuado con ella, la rapta en un rito matrimonial y luego la obliga a vivir bajo su mismo techo. La comunidad, amedrentada por Libardo, no intercede en favor de Amparo quien es sometida a vigilancia permanente, y forzada a convertirse en la mujer del Animal.
Amparo tiene una niña y entones se plantea detener la repetición del ciclo del que también fue víctima su madre, y seguramente lo será su hija. Libardo se la lleva a vivir a un rancho robado, donde Amparo encuentra a otra mujer que él tiene allí encerrada. Ella se descubre ya no como víctima sino como testigo. Confrontada con su espejo, Amparo vence su miedo liberándose del yugo del Animal.
Víctor Gaviria ha ilustrado un cuadro bien oscuro de la vida en los barrios pobres de su ciudad natal, Medellín, y al mismo tiempo es una historia de apelativo innegable para el público latinoamericano, incluido el cubano, pues la violencia contra la mujer se ha demostrado que en Cuba es un fenómeno mucho más habitual de lo que algunos piensan.
A través de la combinación entre los elementos del thriller y del realismo naturalista, La mujer del animal le da continuidad a la filmografía de uno de los más importantes autores del cine colombiano y latinoamericano, respetado internacionalmente por sus anteriores filmes Rodrigo D. No futuro (1990) y La vendedora de rosas (1998).
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