El viejo reclamo que mantenía Cuba desde hace mucho tiempo para avanzar en la normalización de la relación migratoria con los Estados Unidos "acaba de llegar". Al menos en parte.
La eliminación de la "Ley" de los Pies Secos Pies Mojados, supone "el último de los regalos" que le ha hecho Obama a La Habana, pero no a los cubanos, y sí a su gobierno.
¿Qué hay detrás de todo ello?
La estimulación que significaba "tocar tierra", que garantizaba la residencia ha terminado. A partir de ahora, todos los cubanos que lleguen "Sin Visas" serán tratados como un inmigrante común y corriente. Para entrar a territorio estadounidense, tendrán que tener una Visa. Si no la poseen, serán regresados sin contemplaciones.
Esta política, había sido introducida en el año 1995 como Enmienda a la Ley de Ajuste cubano, otorgandole autoridad al Secretario de Justicia de EE.UU de decidir quien podía quedarse y quien no.
La Ley de Ajuste no ha sido derogada. Y en este sentido "La Habana aún está insatisfecha", pero el hecho de que todo cubano que llegue ilegal sea regresado, al eliminarse la prerrogativa del presidente tiene a más de uno preocupado, y dividirá a unos cuantos.
En todo caso, a partir de ahora, quienes lleguen tendrán que comparecer en corte y demostrar que en verdad han sido perseguidos políticos.
Un detalle en el que muchos coinciden, es que "los cubanos no escapan" por la Ley de Ajuste, sino por la situación dificil que se vive en Cuba.
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