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La isla vivió sus mejores años en esta modalidad en los años 70 - 80, cuando su equipo de mayores estuvo a punto incluso de clasificar para un campeonato mundial. Era la época dorada de los Massó, Dagoberto Lara, Andrés Roldán, Pereira, Julio Modesto Cabrera, Ramón Nuñez, José Francisco Reinoso, Carrazana, Loredo.
Sin embargo, el "gran despegue" nunca llegó, y el papel de "segundos" si bien no le ha servido para nada al fútbol cubanos, muchos de los periodistas que se han dedicado a seguir esta modalidad en Cuba, aseguran que ello les ha permitido a los diversos directivos de la Federación de Fútbol Cubano, actuar a sus anchas, porque "gubernamentalmente no los siguen".
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Solo así, se justifica, por ejemplo que una donación dada por la FIFA a la isla, terminó en manos de la Comisión Nacional de Béisbol, y aseguran fue usada en la compra de colchones de poliespuma que fueron puestos en las cercas de los jardines de cada estadio del país.
Todavía, nadie sabe en que estado está y estará el estadio que se iba a hacer en La Polar, y los millones que destinó la FIFA para eso - aseguran fuentes de muy altísimo crédito - "ya no están"
Una de las personas que estoicamente ha estado vinculada desinteresadamente a "no hacer morir la historia del fútbol en Cuba" es Mario Lara, quien recientemente revelara en su Blog del Fútbol Cubano que, la actual dirección máxima de la FCB, ha impuesto la “Ley del silencio” a todos los periodistas deportivos cubanos, cada vez que algún evento relacionado con el fútbol tiene lugar en la isla.
Relata Mario que el actual director de la FCB "sorprendió hace una semana con unas declaraciones en el canal Cubavisión Internacional donde afirmaba que las relaciones entre su entidad y los medios era buena", pero que paralelo a esto, "ha implantado una política en la que ningún técnico o jugador de las selecciones nacionales concentradas en la Escuela Nacional de Fútbol Mario López puede intercambiar con la prensa sin previo conocimiento y aprobación de su persona o alguno de sus subordinados más allegados."
"A partir de ese momento (ya está en vigor de manera extraoficial) cualquier periodista que se tome el trabajo de pasar por el Marrero para conocer detalles del fútbol cubano tendrá que solicitar el permiso a los censores de la Comisión Nacional y esperar por el visto bueno (...) muy pocas veces están disponibles para explicar sus “brillantes” estrategias para conseguir algún buen resultado internacional o mejorar la situación de los torneos domésticos." Y continúa diciendo Mario:
"Para cualquier ciudadano del mundo seguidor del fútbol esta sería una postura normal, pues todas las instituciones profesionales funcionan de esa manera. Todo club o federación tiene su página web, equipo de prensa y personal especializado que se encarga de mostrar a las audiencias el quehacer de la entidad futbolística. En el caso de Cuba es todo lo contrario al no existir un portal en la red de redes donde cualquier persona pueda consultar información y malamente contar con un Jefe de Prensa que cuando se acuerda y de lo que estima conveniente envía información a los medios. Así la divulgación de la gran mayoría de las temáticas relacionadas con el fútbol cubano queda por interés de los periodistas que para hacer su trabajo deben cruzar los dedos (...)"
La actual medida, tiene que ver y mucho - asegura Mario - con recientes comentarios aparecidos en las redes sociales y publicaciones alternativas a las cuales "La Federación" no puede ponerles freno.
Las críticas están encaminadas hacia su pésima gestión y constantes desmanes a todo lo relacionado con el progreso en el fútbol cubano.
"Llegados a este punto - aclara Mario - mi consejo para usted René Pérez (este es el nombre de quien maneja los hilos de la FCB) es que atienda sus asuntos y preocúpese por resolver los verdaderos problemas del fútbol cubano (guerras de poder internas, pérdida de donaciones, falta de transparencia, etc.) que desde hace mucho tiempo no tienen que ver con la prensa."
Una persona que sigue el fútbol cubano desde los años 80, reveló a este redactor anécdotas que ilustran muy bien "cómo es que funciona ese gremio".
"El peruano Company (Miguel) había llegado a Cuba para tomar las riendas del fútbol cubano; fueron los años de mayor gloria post 2000. Y un día, durante un congresillo técnico, un periodista no recuerdo de que provincia, tomó la palabra y con argumentos "técnicos" enfrentó criterios de verdaderos profesionales del fútbol. Al finalizar el Congresillo, Company llamó al periodista para felicitarlo y le dijo a Luis Hérnandez, quien en esa época era "el cacique mayor" del Fútbol en Cuba, que "Cuba necesitaba más periodistas como ese." Luis ni siquiera le estrechó la mano a aquel muchacho.
"Al otro día, el mismo periodista conversaba con Yero, el mejor árbitro que había en Cuba en aquellos años y ahora vinculado a la directiva del fútbol, y Yero que no había participado en el congresillo el día anterior vio a Luis e intentó - otra vez - presentar al periodista. Luis, otra vez, le viró la cara y le negó el saludo al joven, y terminaron diciéndose cosas muy feas."
"Mira, hace unos años se dio una situación muy fea en un partido en Guantánamo. El cuarto árbitro estaba borracho, y tenía debajo de su asiento, una petaca de ron. Se dio una bronca con él, porque le dijeron que estaba borracho, y sancionaron hasta a un jugador que estaba a 800 kilómetros de aquel lugar. Un periodista destapó la información, y aquello empezó a coger presión, pero luego lo llamaron del Partido, porque era militante, y ahí mismo se quedó todo: nadie dijo más nada."
La propia fuente nos reveló además que hace unos años se desató una verdadera guerra contra otro periodista, tunero, y que "siempre ha sido igual".
"Los amedrentan, amenazan, las ofensas van y vienen, los acusan ante la policía incluso; es una dictadura total, no responden a nada, no dan declaraciones, y nadie quiere hacer nada, ni jugarse el pellejo por algo que no tiene pegada; porque en Cuba, el fútbol que interesa es el de "afuera".
"Se han perdido generaciones enteras de futbolistas, por malos manejos, atenciones, pero nadie destapa nada; el periodista que no tiene miedo, no tiene como investigar; no hay nada. Personas como yo, esperan que un día la FIFA mande una investigación de verdad, y verán como van a caer presos más de uno."
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