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En estos tiempos en que son cada día mas frecuentes los asaltos y las violaciones a mujeres en países donde incluso delitos relacionados son hasta pasados por alto por la ley, el aparato comprado por el abuelo de Michelle Kingston, pudiera ser una solución.
Según narraba la joven neoyorquina hace un tiempo, su abuelo estaba muy preocupado porque ella fuese asaltada en la calle, e ideó regalarle este pequeño "aparatico" al cual ella llamó Karma, y que no es más que una especie de tubo que se introduce en la vagina y que tiene, fijadas a sus paredes unas cuchillas.
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El aparato fue inventado por Sonette Ehlers, una mujer sudafricana y su verdadero nombre es RapeX, y fue "sacado a la luz en el 2005" en Sudáfrica, pero nunca fue comercializado de manera masiva.
"Quiero que mi nieta esté siempre a salvo, y es por eso que compré este dispositivo anti violación para ella”, afirmó el abuelo de la joven, al tiempo que contaba después que ella se había molestado un poco al inicio, aunque supo más tarde que era solo por precaución, y protección.
Y como diría el refrán "más sabe el diablo por viejo que por diablo". Una tarde de sábado la joven fue asaltada a punta de cuchillo por un hombre que, la introdujo en un callejón, y la obligó a tener sexo.
Todo "iba bien para el hombre" hasta que decidió introducir su miembro en la vagina de la joven; entonces sintió un dolor agudo, y al retirarlo sintió más dolor aún.
Y es que las cuchillas de "Karma" funcionan tanto en un sentido como el otro.
El atacante, Ronald Steadway, de 38 años, quedó en el piso retorcido del dolor mientras se desangraba.
La joven llamó a la policía, y este fue detenido,
Una vez en el hospital, su miembro debió ser amputado.
Ahora cumple prisión, y sin miembro.
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