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La cantante Joy Villa acudió a los Grammy con un polémico vestido, que ha sido el responsable de que su asistencia a la ceremonia no haya pasado desapercibida para nadie.
La artista llegó a la gala cubierta con una capa blanca, de pies a cabeza, pero cuando empezó a ser fotografiada se desabrochó la capa y mostró un vestido con el lema que utilizó Donald Trump durante su campaña electoral: "Make America great again".
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En la cola del vestido podía leerse el nombre del nuevo presidente de Estados Unidos.
Después de la avalancha de críticas que generó el peculiar atuendo, la cantante ha subido a redes sociales una collage con diferentes fotos del vestido que ha acompañado con un texto en el que intenta explicar la elección de su vestuario.
"A veces solo tienes que ser libre para expresarte. Gracias a todos los que me apoyan y a mis fieles creyentes. La vida va de vivir libre y amarla", ha escrito Joy para acompañar el collage.
En otra publicación en la misma red social la cantante ha señalado: "Hazlo a lo grande o no lo hagas. Puedes quedarte por lo que defiendes o caer por lo que no. Sobre todo, puedes decidir por la tolerancia y el amor. De acuerdo en no estar de acuerdo".
"Deberíais ver a la persona que hay detrás más allá de la política, y llevarlo con dignidad, siempre. ¡La vida está hecha para ser vivida, así que camina con valentía!", prosigue Joy Villa.
Por su parte, el creador del vestido, Andre Soriano, un diseñador filipino en Estados Unidos que ha manifestado públicamente en varios ocasiones su apoyo a Trump, resaltó en su perfil de Instagram que el vestido de Villa "es un tributo a nuestro presidente de Estados Unidos de América".
Más allá de la polémica, la cantante de 25 años ha logrado ser una de las asistentes más nombradas después de la cita musical pese a no haber estado nominada a ningún galardón.
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