Vídeos relacionados:
La Habana, 15 mar (EFE).- Gracias al acceso a Internet en Cuba y al tratamiento de temas que no cubre la prensa nacional, los medios provinciales del país han irrumpido con protagonismo en la escena mediática, ya que antes su condición de prensa local los relegaba a un segundo plano.
Hoy son los medios provinciales los que acaparan los premios otorgados anualmente el gremio periodístico cubano, en especial los semanarios estatales del centro de la isla.
Lo más leído hoy:
"Esa territorialidad ciertamente le da más libertad y tiempo a estos medios a la hora de investigar determinadas cuestiones y no tener la presión que inevitablemente tiene un órgano nacional traducida en compromisos -que también tenemos-, el flujo constante de noticias, las coberturas especiales, entre otros", dijo a Efe Glenda Boza, una joven reportera en la central Cienfuegos.
Los "periodistas de provincia" -que no provincianos- tienen menor acceso a las grandes fuentes autorizadas y menos facilidades que sus colegas de la capital, pero a la vez tienen más capacidad para tratar asuntos enfocados en el territorio que les ocupa, pero que son trasladables a todo el país.
Con experiencia en la estatal Agencia Cubana de Noticias y ahora en el semanario 5 de Septiembre, Boza explica que los artículos surgen en su mayoría "por iniciativa de los propios periodistas o sugerencias de amigos, vecinos y familiares".
"En el caso del Cinco de Septiembre hay muchas formas de retroalimentación con el público, que no solo envía cartas sino además envía mensajes de texto para una sección del periódico o escribe comentarios en la web. De todas esas formas de retroalimentación también se sacan temas para trabajos", afirma.
El semanario, que recuerda la fecha del levantamiento popular de la ciudad en 1957, ha publicado artículos sobre la masturbación pública, los cubanos repatriados y el desabastecimiento y los altos precios de los productos agrícolas en los mercados.
Se trata de temas difíciles de encontrar o directamente inexistentes en la prensa nacional cubana.
Este último, titulado "El difícil aterrizaje de la comida en Cienfuegos", provocó una airada respuesta de la dirección provincial de Agricultura, que acusó a los reporteros de ser "una vergüenza para el periodismo serio" del país, según denunció la dirección del "Cinco" en apoyo a sus informadores.
Y es que sin el decisivo apoyo de la dirección de los medios, "muy poco o nada puede hacerse" coinciden en sendas entrevistas por correo electrónico Lisandra Gómez y Mayli Estévez, de los semanarios "Escambray", de Sancti Spiritus, y "Vanguardia" en Villa Clara, también de la zona central.
Gómez recuerda que "Escambray" fue de los primeros en tratar la crisis migratoria de los cubanos varados en Latinoamérica o la deserción de los hermanos beisbolistas Yulieski y Lourdes Gourriel, algo que se debe a la "visión de su director, Juan Antonio Borrego, quien durante años ha sabido encauzar temas álgidos".
Estévez señala que "hay muchos temas que quedan en el tintero y por lo general si no cuentas con el apoyo del director no camina tu tema y simplemente se queda en idea".
"Hace tiempo que los periodistas de provincia llevamos una batalla" para que los "semanarios hablen a través de trabajos de fondo, de comentarios, entrevistas, reportajes y menos de notas de actos y reconocimientos, que cinco días después no cumplen ningún objeto", comenta Estévez, una respetada periodista deportiva.
No le asusta la etiqueta de "polémica" que se ha ganado y afirma que las limitaciones geográficas provocan que algunas de las denuncias que realizan en sus reportajes no "tomen un alcance mayor", lo que a la vez permite que se relaje el control de las autoridades sobre los contenidos informativos.
Sin embargo, internet ha comenzado a cambiar ese panorama.
En Cuba, donde todavía priman medios impresos como los diarios Granma y Juventud Rebelde o la señal televisiva oficial, los tímidos intentos de aumentar la conectividad han mejorado el acceso al trabajo de los medios locales, el cual "si es de calidad o medianamente polémico" tiene un "alcance impensable", dice Estévez.
"Algunos piensan que un periodista es un vocero, que propaga las actividades de determinada organización, lastimosamente son muchos años de pensamientos de ese tipo", defiende la periodista.
La propia Unión de Periodistas de Cuba reconoce que en estas publicaciones se ve el "estilo de periodismo más profundo, más crítico, más analítico", que reclaman los lectores cubanos.
El llamado al X Congreso del gremio, publicado hoy por esta organización oficialista, afirma que en estos medios se dejó "a un lado el lenguaje apologético, el triunfalismo, la retórica compulsiva, para dar paso a una expresión más realista, más razonada y más equilibrada de las realidades que vive el país".
Archivado en: