El alcance del bombardeo de Estados Unidos sobre la base siria de Shayrat tuvo una efectividad "muy baja", después que el Ministerio de Defensa de Rusia revelara que solo 23 de los 59 misiles de cruceros lanzados llegaran a buen puerto.
Según la información de 'RT Actualidad', una estación de radiolocalización, un almacén de equipo material y técnico, un centro educativo, un comedor y seis aviones MiG-23 que estaban pendientes de reparar, fueron destruidos.
En este sentido se desconoce el paradero de los otros 36 proyectiles, lo que ha llevado a las autoridades de Siria a iniciar un operativo de búsqueda. Se teme que hayan ocasionado víctimas en la sociedad civil.
El movimiento militar de Washington tendrá consecuencias en las relaciones diplomáticas con Rusia, ya que el portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, el general Ígor Konashénkov, ha afirmado que se reforzará el sistema de defensa aéreo del Ejército Sirio en un "futuro próximo".
Misiles que cuestan 832.000 dólares
Los Tomahawks son misiles de crucero de rango intermedio, es decir, tienen un alcance de unos 1.250 a 1.500 kilómetros.
Cada unidad costó cerca de 569.000 dólares de 1999, de acuerdo con la Marina de los EE.UU., una cifra equivalente a alrededor de 832.000 dólares de hoy día.
"Lo importante de los Tomahawks es que no necesariamente van del punto A al punto B en línea recta, sino que tomarán una especie de ruta de circunnavegación para que no puedan ser derribados", explicó a 'CNN' el mayor retirado del Ejército de EE.UU. James 'Spider' Marks.
Estos proyectiles son disparados desde el mar y viajan a una altura baja, lo que implica que Estados Unidos pueda apuntar a la base aérea de Siria desde largas distancias.
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