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En medio de los graves enfrentamientos que está viviendo Venezuela en los últimos días, el presidente Nicolás Maduro declaró este domingo 23 de abril, que quiere “elecciones ya”.
Se refería a los comicios regionales, las elecciones de gobernadores ―que debieron haberse celebrado en diciembre de 2016― y las de alcaldes, previstas desde un inicio para este año.
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En su habitual programa dominical, Maduro, señaló:
“Elecciones sí, quiero elecciones ya, es lo que digo yo como Jefe de Estado, como Jefe de Gobierno”.
La oposición también exige elecciones, pero generales. Las que pudieran sacar a Maduro del poder y que no están previstas hasta el 2018.
Sin embargo, pese a las protestas de la oposición, que ha pedido que se adelanten las generales a este 2017, el Gobierno de Maduro ha descartado un adelanto.
Aunque Venezuela es ahora mismo un país dividido, en medio de una severa crisis económica y con un rechazo al Gobierno que ronda el 70% ―según encuestas citadas por El Nuevo Herald― lo cierto es que Maduro da por seguro un triunfo de los suyos, y asegura:
“Con el fracaso que han tenido en la Asamblea Nacional (único poder que controla la oposición), estoy seguro que nuestro pueblo le va a pasar factura en cualquier elección que venga y vamos a tener una nueva y buena victoria”.
Tras haber suspendido el proceso de revocación a Maduro en un referendo, el Consejo Nacional Electoral (CNE) pospuso las elecciones regionales con el fin comenzar un proceso de legalización de los partidos que no habían participado en la pasada campaña.
En las citadas declaraciones, Maduro reiteró: “Estoy listo para lo que diga el Poder Electoral”.
Y añadió:
“Yo estoy listo para demostrar que hemos cumplido y si no hemos cumplido, cumplirlos”.
En su intervención, Nicolás Maduro invocó, incluso, al Papa Francisco, del que dijo:
“Y le pido al papa Francisco desde aquí que nos siga acompañando en el diálogo porque hay una conspiración en Roma contra el diálogo en Venezuela y aquí también”.
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