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"Tengo que poner de mi parte, trabajar duro y hacerlo bien para subir. A mí las cosas se me han hecho siempre complicadas. Los entrenadores me han dicho que siga trabajando con mis piernas para que cumpla mi deseo".
La frase es del zurdo cubano Onelki García, quien hace cuatro años vistió fugazmente la casaca de los Dodgers. Sin embargo, entonces no pudo establecerse en aquella pelota –lesiones incluidas-, y aunque los Medias Blancas lo reclamaron posteriormente en waivers, problemas con el comando de los lanzamientos lo dejaron sin trabajo en 2016.
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Su meta del presente no podía ser otra que regresar a la Gran Carpa. De ahí que cada día trate de hacerlo mejor con la sucursal de Triple A de los Reales, Omaha Chase Storms.
"De momento me ha ido bien”, apunta en declaraciones aparecidas en un comentario publicado en Las Mayores bajo la firma de Francys Romero. “No he lanzado mucho, pero sigo trabajando y enfocado para cuando me den la oportunidad seguir haciéndolo bien".
De 27 años y con una recta entre 94 y 95 millas, García lidia por convertirse en un efectivo especialista en relevo contra zurdos. Por ahora, sus números con el segundo equipo de Kansas se resumen en 11.1 innings con promedio de limpias de 2.38 y siete ponches.
Tal como reza en el texto referido, “en su interior García cree que pisará de nuevo un terreno de Grandes Ligas. Los dos años que estuvieron pletóricos de lesiones ya son parte del pasado para él. No piensa en su bajón de rendimiento ni en cómo las lesiones le imposibilitaron demostrar su mejor nivel”.
El siniestro guantanamero laboró por espacio de tres años en Series Nacionales, con discretos resultados en materia de carreras limpias pero interesantes en cuanto a ponches por cada nueve entradas. Con los Dodgers, allá por 2013, tiró una entrada y un tercio, regaló cuatro boletos, le soplaron un jonrón y terminó con PCL de 13.50.
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