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Un grupo de 126 cubanos varados en Panamá se enfrenta a una insólita propuesta del gobierno de ese país para garantizar la salida segura de estos migrantes: visado de entradas múltiples y un capital inicial para ejercer en Cuba como cuentapropistas.
Según un reportaje del Nuevo Herald, la propuesta está dirigida solo a los 126 migrantes que se encuentran en el albergue temporal en Gualaca en el occidente del país.
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El viceministro de Seguridad panameño Jonathan del Rosario dejó claro que no hay ninguna posibilidad de que los cubanos varados en su país tras el fin de “pies secos, pies mojados” puedan quedarse en el territorio nacional.
“Hemos sido muy francos. Su ingreso al país de manera irregular imposibilita que clasifiquen para algún tipo de estatus migratorio en Panamá que no sea el de refugiado”, sostuvo.
Para el funcionario, la propuesta “no es una mala opción”. “El abanico de opciones que tenemos no es muy amplio y los países que hemos consultado no están acogiendo migrantes”, explicó.
De acuerdo con la publicación, el gobierno panameño decidió cerrar en abril el albergue temporal que Cáritas mantenía en la capital. La propuesta de relocalización en Gualaca fue aceptada por solo 126 de los más de 300 migrantes que allí se encontraban.
A los que sí aceptaron el traslado, Panamá facilitaría un visado de entradas múltiples al país para que los futuros cuentapropistas pudieran abastecerse en el mercado de esa nación de los productos necesarios para su negocio, destacó el diario.
“Está claro que no queremos regresar, pero entre hacerlo obligatoriamente o con la opción de dejar una puerta abierta a volver me quedo con la segunda”, dijo al Nuevo Herald Yosvani López, un joven migrante de Caibarién.
Del Rosario considera demás que la mayoría de estos migrantes no pueden demostrar una persecución individual y que han salido de Cuba por razones económicas, por lo cual no podrían acogerse al estatus de refugiados.
“Un refugiado generalmente pide refugio en el primer país al que llegue. Y como ellos ya han visitado varios países antes de llegar a Panamá, la ventana del refugio –no que no se pueda dar– pero… es poco viable esa alternativa.”, comentó.
El Herald segura que los migrantes ubicados en el albergue de Gualaca solamente pueden salir del lugar bajo vigilancia y una vez por semana para recoger dinero en Western Union y hacer sus compras.
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