Luego de varias semanas de negociaciones, el Senado de Estados Unidos hizo público el proyecto de ley que cambiará muchos aspectos del sistema de salud en el país norteamericano y que sustituirá a Obamacare.
El documento consta de 142 páginas, y constituye una propuesta que, según CBO, podría afectar a 23 millones de estadounidenses.
La propuesta, entre otros aspectos, contempla la reducción o eliminación de los beneficios proporcionados por Obamacare; retirará fondos de Planned Parenthood; establece impuestos más bajos para los ricos; y reestructura el programa de salud pública de América para los estadounidenses de bajos ingresos y discapacitados, Medicaid.
Por su parte, los líderes republicanos del Senado enfatizaron que la legislación está sujeta a cambios mientras negocian detalles en un esfuerzo por ganar 50 votos, el mínimo requerido para que el proyecto de ley pase.
Sobre la ley, Donald Trump expresó que la versión final sería “muy buena” después de “una pequeña negociación”.
Además, sobre el programa del antiguo presidente el mandatario refirió: “Obamacare está muerto, y estamos poniendo un plan hoy que va a ser negociado. Nos encantaría tener el apoyo de algunos demócratas, pero son obstruccionistas “.
Algunos expertos han expresado que la nueva legislación podría dejar a millones de estadounidenses sin seguro de salud y podría tener un fuerte impacto en las poblaciones vulnerables, como las personas que se están recuperando de la adicción, los ancianos de clase media y las mujeres y los niños.
Sobre la legislación, la senadora Elizabeth Warren dijo: “Están pagando recortes de impuestos con vidas americanas”.
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