La Administración Trump vuelve a sumar un nuevo capítulo polémico después de anunciar que se frenará la entrada de transexuales al ejército, según la información publicada en 'El País'.
"Desde que estoy en el puesto he enfatizado que el Departamento de Defensa debe medir cada decisión política con un estándar crítico: ¿afectará a la disposición y letalidad de las fuerzas? Dicho de otro modo, ¿cómo influirá en la capacidad militar para defender la nación?", aseguró el secretario de Defensa, el teniente general James Mattis.
En cualquier caso la medida es controversial porque implica suspender una orden aprobada por Barack Obama, que entraría en vigor este 1 de julio. Ahora la Casa Blanca ha decidido que se aplazará hasta el próximo 1 de enero.
Mientras tanto, el Pentágono sigue prohibiendo el reclutamiento de estas personas, incluso ha pedido que se elabore un estudio para determinar si su ingreso representa un riesgo para la efectividad de las tropas.
"La decisión del general Mattis de mantener la prohibición de reclutar personas transgénero provocará que mientan en su intento de ingresar en las fuerzas armadas. Lo mismo ocurría antes con los homosexuales y la política del ‘no preguntes, no cuentes'. Todo esto carece de sentido porque, como predijeron los estudios, los transexuales han demostrado con creces su capacidad de servicio", denunció en un comunicado el centro de estudios sexuales Palm Center, que colabora con el Pentágono.
Según un estudio de la Asociación de Médicos de Estados Unidos, cerca de 13.000 transexuales están enrolados en las fuerzas militares, una cifra que representa el 1 por ciento. Los investigadores también cree que los médicos del ejército no están preparados para atender a los transexuales.
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