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La Habana, 25 jul (EFE).- Según informaron hoy medios estatales, la mayor planta de procesamiento de mineral de Cuba, uno de los principales proyectos industriales que desarrolla la Isla, entró en fase de pruebas con el objetivo de comenzar a exportar concentrado de zinc y de plomo a final de año.
El proyecto minero-metalúrgico Castellanos está ubicado en la provincia occidental de Pinar del Río y comenzó sus pruebas el 1 de julio, un año y medio después del inicio de su construcción, explicó al diario Granma el gerente general adjunto de la Empresa Mixta Minera del Caribe S.A. (Emincar), Justo Hernández.
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La firma Emincar se constituyó en 2012 mediante una alianza de la estatal cubana Geominera -con más de la mitad del capital- y la trasnacional europea Trafigura.
Está previsto que en el último trimestre del año las instalaciones, que se abastecerán del cercano yacimiento Castellanos, puedan producir 12.000 toneladas de concentrado de zinc y 5.000 de concentrado de plomo, y la primera exportación tendrá lugar entre noviembre y diciembre, explicó Hernández.
La infraestructura requirió de una inversión de 278 millones de dólares, lo que "probablemente" la convierte en la mayor del país en la actualidad, indica Granma.
En el proyecto han intervenido, junto a Emincar, entidades de los ministerios cubanos de Energía y Minas, y Construcción e Industria, junto al Instituto de Recursos Hidráulicos y cooperativas privadas, además de unos 70 especialistas extranjeros, "aunque el 96 % de la fuerza que ha participado es cubana", refiere la nota.
Junto a las instalaciones también se reparó la presa Nombre de Dios, que abastecerá de agua al proyecto, se acondiciona el puerto de Santa Lucía y se construyó una presa de colas para depositar los residuos del proceso.
Ese puerto se empleará para enviar la producción por vía marítima hasta la terminal de contenedores de la Zona Especial de Desarrollo del puerto Mariel (ZEDM), a 45 kilómetros al oeste de La Habana, desde donde se realizará la exportación.
Según los estudios previos, el yacimiento Castellanos garantiza a la planta de procesamiento la materia prima para los próximos once años, aunque el yacimiento Santa Lucía, a un kilómetro y medio, podría extender la vida del proyecto "a 25 años o más".
Con esta iniciativa se busca también devolver la actividad minera al poblado de Santa Lucía (210 kilómetros al oeste de La Habana), ya que del yacimiento Castellanos se extrajo oro entre los años 90 y principios de los 2000, hasta que la caída del precio de los metales y los altos costos de producción provocaron el cese de la explotación y la pérdida de más de 2.000 empleos.
El principal polo minero de Cuba se concentra en la otra punta de la isla, en la localidad de Moa (provincia de Holguín, a unos 800 kilómetros al este de La Habana), principal zona de extracción del níquel cubano, una de las principales fuentes de ingresos de la isla, solo por detrás de los servicios profesionales y el turismo.
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