La quimera casi es una realidad. Guillermo Rigondeaux deberá subir de peso (de las 122 libras hasta 130) para enfrentar al ucraniano Vasyl Lomachenko.
Tras no pocas discrepancias, el mandamás de Top Rank, Bob Arum, y el jefe de boxeo de Roc Nation, Dino Duva, manifestaron que están muy cerca de cerrar un pacto que colocará frente a frente a dos de los mejores libra por libra en la actualidad.
Si todo sigue viento en popa y a toda vela, el próximo 9 de diciembre, en el grandioso Madison Square Garden, de Nueva York, “El Chacal” chocará ante el ucraniano en lo que será su prueba más dura en el pugilismo profesional. Dos campeones olímpicos que viven etapas diferentes en sus trayectorias.
“Rigo”, a sus 36 años de edad, buscará despejar todas las dudas que siempre han existido alrededor de su anatomía, a pesar de su inobjetable calidad. Vasyl, de 29, es uno de los mimados del boxeo mundial, el niño lindo de Arum. El mismo Arum que vio como el 13 de abril del 2013, otro de sus baluartes, Nonito Donaire, se quedó sin armas y fue desnudado, a golpe de una exquisita esgrima boxística, por el santiaguero Rigondeaux.
Paciencia. Paciencia. Aún no podemos gritar de alegría, pero vaya preparando una amplia sonrisa porque, al parecer, el cubano tendrá una grandiosa oportunidad para enseñarle al planeta su excelsa calidad y, de una vez y por todas, propinarle una galleta sin mano a los miles de seres humanos que no han dejado de inquietarlo. Nada será fácil, pero la primera victoria sería haber conseguido un SÍ que parecía imposible.
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