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A Víctor Figueroa le pusieron en las manos una papa caliente. VM32 dejó Matanzas y detrás de él salieron unos cuantos jugadores importantes, entre ellos el toletero Yordanis Samón, el outfielder Víctor Víctor Mesa y los pitchers Adrián Sosa y Alexander Rodríguez. Para colmo, no podría contar con Yurisbel Gracial –contratado en la Liga Can Am- hasta bien avanzada la clasificatoria.
La misión era complicada. Sin embargo, para asombro de muchos el hombre la cumplió con creces, hasta el punto de ganar 28 desafíos de 45 posibles y ubicarse tercero en la tabla, por encima del poderoso Pinar del Río y el monarca doméstico vigente, Granma.
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Así, repleto de entusiasmo, llegó Figueroa a la jornada de refuerzos. Y parece que le ha cogido el gusto a dar sorpresas, pues entonces volvió a dejar estupefactos a muchos al empezar a solicitar, una ronda tras otra, a peloteros de una misma provincia.
Cuatro avileños escogió el manager de los yumurinos, y en la última petición agregó a un jugador de Villa Clara. ¿Rendirá frutos este experimento? Recuerdo que hace algunos años, Lázaro Vargas incorporó a cuatro tuneros a Industriales y el resultado fue un desastre. Pero Chúa (como todos le dicen) no piensa reeditar aquel fracaso.
“La diferencia –me comenta- radica en que esos pitchers de Las Tunas carecían de la experiencia que les sobra a los peloteros de Ciego, acostumbrados a lo largo de varias Series Nacionales a estar en las postemporadas y discutir finales”.
“En mi caso seleccioné a un lanzador (Dachel Duquesne), un catcher (Osvaldo Vázquez) y un torpedero (Yorbis Borroto) fogueados en la competencia, todos ellos jugadores ranqueados que pueden ayudar muchísimo”, abunda. “Además convoqué a Liomil González, que no ha tenido un campeonato favorable pero sé que se puede recuperar, y Javier Mirabal, un muchacho joven con buenas condiciones que saldrá en los finales de partido”.
Definitivamente, te gusta la idea de haber agrupado a varios Tigres...
-La ventaja de tener a jugadores de una misma provincia es que no se van a sentir aislados nunca, ni siquiera al comienzo. Son amigos, se van a ayudar unos a los otros, van a tener ese team work que tanta falta hace.
¿Te quedó alguna insatisfacción luego de los refuerzos?
-Por supuesto, se me fue Cepeda. Lo tuve cerca pero no me llegó. No obstante, cogí a Vázquez. Yo necesitaba un cuarto bate y ahí lo tengo.
¿Cuál es la meta de Matanzas en 2017?
-Estar entre los cuatro.
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