Vídeos relacionados:
Numerosos reportes han elevado a más de 600 los intentos de la CIA para asesinar a Fidel Castro durante las primeras décadas de la Revolución. Utilizar un traje de buceo envenenado y una concha marina explosiva se encuentran, sin dudas, entre los planes más curiosos.
A raíz de la reciente desclasificación de los archivos secretos en torno al asesinato de John F. Kennedy, se han hecho públicos una serie de documentos que revelan no pocos planes y esquemas extraños inventados por la CIA para matar Castro.
Lo más leído hoy:
Algunas de las ideas más extravagantes incluyeron regalar al mandatario cubano, que era un entusiasta del buceo, un traje de neopreno empolvado con hongos de madera foot que producían una enfermedad cutánea crónica.
Asimismo, el traje vendría acompañado de un mecanismo de respiración, el cual se planeaba infectar con bacilos tuberculosos. Este “regalo”, sería entregado por el general Donovan, al frente de la negociación con Castro para la liberación de los prisioneros de Bahía de Cochinos.
Según recoge el Daily Mail, que tuvo acceso a los documentos, otro complot discutido por la CIA fue la preparación de una “irresistible” concha marina que sería sumergida en un área frecuentada por Castro en sus exploraciones marinas.
"La concha marina estaría cargada para explotar cuando se levantara el caparazón", dice el archivo.
La CIA descartó el plan después de realizar más investigaciones sobre la idea de plantar una concha explosiva. "No hay conchas en el área del Caribe lo suficientemente grandes como para contener la cantidad adecuada de explosivo y lo suficientemente espectaculares como para atraer la atención de Castro", recoge el archivo.
Los documentos sobre JFK, que se publicaron en el sitio web de los Archivos Nacionales el jueves por la noche, revelaron además que el hermano del presidente Kennedy, el entonces Fiscal General Robert Kennedy, supo que la CIA intentó pagarle a un mafioso italiano para matar a Castro.
Robert le explicó al FBI que la CIA le encargó a un operativo que se acercara al gánster siciliano-estadounidense, Sam Giancana, "con la propuesta de pagar 150,000 dólares para contratar a un pistolero con el encargo de ir a Cuba y matar a Castro".
"El Fiscal General Kennedy declaró que la CIA nunca debería volver a utilizar a la gente de la mafia sin antes consultar con el Departamento de Justicia porque sería difícil enjuiciar a esas personas en el futuro", reza el archivo.
Archivado en: