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Se llamaba Cebo Makhaye y era la esperanza de una amplia familia sudafricana con todos sus miembros en paro. El joven, que estudiaba quinto año de Medicina en Cuba, ha fallecido ahogado en una piscina en La Habana junto a su amigo Sibusiso Thanks Ngeleka. El Gobierno de su país ultima los preparativos para repatriar los cadáveres, según informa el diario Zululand Observer.
Makhaye, que murió a principios de mes, debía regresar a Sudáfrica en julio próximo para hacer las prácticas antes de graduarse como médico. Originario de la región rural de Manguzi, en la parte del país más cercana a Mozambique, el joven decidió refrescarse en la piscina de una casa donde celebraban una fiesta privada. Lo hizo en compañía de su amigo Sibusiso, de cuarto año de Medicina. Al ver que no regresaban, sus compañeros comenzaron a buscarlos.
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Cebo fue rescatado con vida de la piscina, pero murió de camino al hospital. Su amigo Sibusiso fue hallado muerto. Los dos cuerpos llegarán a Sudáfrica en los próximos días, en cuanto se les practique la autopsia en Cuba. Serán embalsamados y enviados primero a Francia y de ahí a Johannesburgo. A continuación, a su KwaZulu natal, donde se encuentra su ciudad, Manguzi.
Los dos alumnos fueron elegidos para estudiar en Cuba no sólo porque eran "brillantes" sino también porque procedían de familias muy pobres. En la actualidad hay 2.885 jóvenes sudafricanos estudiando Medicina en la Isla. En total se han graduado 590.
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