Un total de 64 “hechos extraordinarios”, de los cuales 22 se procesaron como delitos, acarrearon para la estatal BioCubaFarma una pérdida de más de 575 mil pesos en el primer semestre del presente año, informaron medios oficiales.
Durante un pleno del Parlamento presidido por el primer vicepresidente de la isla Miguel Díaz-Canel, se dio a conocer el martes que la mayor industria farmacéutica cubana perdió 575 345 pesos cubanos (23 972 CUC) desde finales de 2016, por actividades ilícitas en las que se destacó la sustracción de financiamiento destinado al salario de los obreros.
“La mayor incidencia se reportó en la Empresa de Servicios Generales (SERVIGEN), fundamentalmente por el hecho de corrupción ocurrido a finales de diciembre de 2016 en la UEB de Construcciones, donde trabajadores y directivos del área económica y de recursos humanos sustrajeron financiamiento destinado al salario de los obreros”, dijo el presidente de BioCubaFarma, Eduardo Martínez Díaz.
BioCubaFarma reportó 64 sucesos extraordinarios de enero a junio de 2017, de los cuales 22 han sido clasificados como delitos, el 34,3%. Entre las empresas con más incidencias se encuentran los Laboratorios MEDSOL (12), EMCOMED (7), ESINES (5), SERVIGEN (4), MEDILIP (4), ETI (4), CNIC (3), Roberto Escudero (3) y Farmacuba (2), recogió el portal Cubadebate.
Ante los parlamentarios, el ejecutivo significó como tendencias delictivas más significativas el robo o desvío de alcohol, materiales de la construcción, piezas de computadoras y medicamentos, de este último se registran 18 incidencias en los primeros seis meses del año.
En estos hechos estuvieron involucrados dos altos directivos y 59 trabajadores. En total, fueron aplicadas 239 medidas disciplinarias, que van desde la separación definitiva de la entidad y el sector, hasta la democión de cargos y las amonestaciones públicas.
Martínez Díaz recordó que del cuadro básico de medicamentos del país, que está integrado por 801 productos, esta organización empresarial procesa 499 de los 505 de producción nacional que lo integran.
Por su parte, otro de los diputados de La Habana apuntó que la farmacéutica exporta sostenidamente más de 400 millones de dólares, ahorrándole al país más de 2 mil millones.
¿La escasez de medicamentos en Cuba es resultado del robo o viceversa?
La vicepresidenta de BioCubaFarma, Tania Urquiza Rodríguez, detalló al referido medio que en la entidad han identificado como hechos punibles más frecuentes la sustracción de medicamentos, los robos comunes e incidentes relacionados con la seguridad informática.
No obstante, al cierre de noviembre, en la empresa han acontecido 30 hechos de robo o intento de desvío de medicamentos. “Afortunadamente algunos han sido frustrados por los propios cuerpos de Seguridad y Protección de las empresas, pero el número de casos se ha incrementado con respecto al año 2016”, reconoció la directiva.
Cuando existe déficit de medicamentos en el país proliferan estas indisciplinas, sentenció Martínez Díaz.
Según la vicepresidenta Tania Urquiza, los medicamentos más vulnerables a ser sustraídos son precisamente los más populares. Las tabletas, los analgésicos, antipiréticos, y otros mucho más costosos, que se desfalcan para venderlos en otros países, como los hemoderivados y los biotecnológicos.
Urquiza indicó, en tal sentido, que cuando un trabajador incurre en un delito de esta índole se pone a disposición de los tribunales y la administración lo separa inmediatamente de la empresa, “porque hemos comprobado que el cambio de puesto laboral no es efectivo, pues vuelven a recaer y no podemos correr ese riesgo”.
“Quienes incurren en el robo alegan que se llevan el medicamento para ayudar a un familiar que lo necesita, pero esta justificación no procede. En BioCubaFarma siempre estamos pendientes de las necesidades de las familias de nuestros trabajadores, siempre que alguien precisa un producto lo buscamos, incluso si tenemos que trasladarlo de un centro productor a otro”, sostuvo la directiva.
Algunos de los casos son detectados por la Policía, otros han sido frustrados en la puerta del laboratorio. “Realmente no son grandes cantidades, aunque en un puñado pueden caber decenas de tabletas de acuerdo al tamaño. En un caso reciente, el desvío sí nacía en el propio almacén, por suerte pudo ser detectado a tiempo. Pero en otro el trabajador que incurrió en el delito confesó que llevaba más de cuatro años desfalcando productos. Si cada vez que ese señor fue a la fábrica a trabajar, se llevó un poquito, al final la afectación es considerable”, añadió.
Con información de Cubadebate.
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