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El mejor bateador del equipo Cuba en el siglo XXI, el espirituano Frederich Cepeda, no pudo cumplir con Pinar del Río su sueño de ganar un campeonato nacional. Sin embargo, todavía no ha cerrado la puerta a la esperanza, porque sabe que goza de grandes opciones de ser solicitado en la jornada de refuerzos señalada para el 28 de diciembre.
“Lo mío es jugar pelota, de ahí que estoy esperando los refuerzos. Hay managers que ya hablaron conmigo interesados en pedirme. Pienso que en la primera ronda todo el mundo va a adquirir lanzadores, y que entonces se harán algunas peticiones de jugadores de posición”, me dice vía móvil.
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Pese a su veteranía y las lesiones que lo mantuvieron apartado del béisbol –intervención quirúrgica incluida-, Cepeda regresó en perfecta forma al juego cotidiano, hasta el punto de cerrar la campaña en el Top Ten de los mejores averages.
“Estoy satisfecho con el trabajo que hice”, asegura. “En las últimas subseries perdí unos cuantos puntos de promedio, aunque no creo que se debiera tanto al cansancio como a que atravesé una mala racha en la que los batazos me salieron de frente y después tuve problemas personales que me obligaron a viajar a Sancti Spíritus”.
A punto ya de despedirnos, le pregunto por sus posibilidades de asistir a la Serie del Caribe 2018.
“Solo me han convocado para una edición, y casualmente en esa fuimos campeones. Para serte sincero, quisiera poder estar en el equipo a la próxima Serie del Caribe, pero eso no depende de mí”.
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