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Cumplida la segunda (y contraproducente) jornada de refuerzos, los cuatro equipos definieron ya los “rostros” con que participarán en la fiesta de la postemporada del certamen cubano de pelota.
¿Quiénes salieron bien? ¿Quiénes, no tanto? Antes de dejarlos con las tablas que resumen la faena de los nuevos refuerzos en la etapa recién finalizada, dediquémosle un párrafo a cada petición.
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Matanzas: Sabedor de que el pitcheo gana campeonatos, Víctor Figueroa introdujo un par de cartas veteranas (Miguel Lahera y Yosvany Torres) en el mejor staff de la contienda, además de un bateador de elite (Frederich Cepeda) para encargarse de la pradera izquierda y reforzar la medular de su line up. Ahora es de esperar que Torres se sume a Yoanni Yera, Dachel Duquesne y Roy Hernández en las aperturas, mientras Lahera muy probablemente asumirá el rol de taponero. No obstante, cabe señalar que ambos derechos rebasaron padecimientos musculares en la segunda parte del evento, y que Cepeda terminó de capa caída con el madero en ristre.
Las Tunas: Los Leñadores batean tanto que Pablo Civil se limitó a solicitar serpentineros. Así, en adelante tendrán al mejor cerrador de las Series Nacionales (José Ángel García), un abridor de cabecera en el actual equipo Cuba (Vladimir Baños) y una joven promesa de hasta 95 millas que ayudará en funciones de relevo (Yosimar Cousin). Habida cuenta de que Industriales –su rival de turno- tiene problemas históricos con el pitcheo zurdo, muchos pensaron que el mentor se decidiría por adquirir a Misael Villa, pero evidentemente se dio por satisfecho con tener en sus filas a Yudiel Rodríguez y Luis Ángel Gómez, dos siniestros destacados a lo largo de todo el torneo.
Industriales: Víctor Mesa me confesó que había tenido la intención de conseguir a Baños o Lahera, pero no le llegaron. Su equipo necesitaba de una inyección urgente de abridores –agravada la crisis por la lesión de Frank Monthiet-, y a la postre apostó por dos hombres de experiencia (Vladimir García y Erly Casanova) y un tirador de la llamada mano equivocada (Villa) con excelente rendimiento para la causa del eliminado Artemisa. Ojo con esto: García fue bateado libremente en repetidas ocasiones y lució por debajo de sus registros de velocidad habituales. Para cerrar, una pregunta: ¿no habría sido factible incorporar en el centro de la alineación a un slugger como Lázaro Hernández?
Granma: Para mi gusto, Carlos Martí se quedó corto. Cierto es que su infield requería reforzarse en las paradas cortas (¿y qué mejor opción que Yordan Manduley?) pero pienso que en la segunda ronda pudo inclinarse por un relevista o abridor de garantías en lugar de convocar a un utility (Raúl González). El avileño vivió un slump intenso con la camiseta de Pinar y ahora se ocupará del tercer saco, posición donde los Alazanes podían emplazar a Osvaldo Abreu o Lázaro Cedeño. La restante novedad de los granmenses será un apagafuegos (Raidel Martínez), de manera que tendrán que arrostrar los play off con el mismo grupo de abridores de las últimas semanas, encabezado por Lázaro Blanco, Alaín Sánchez y Ulfrido García.
En próximas entregas estaré analizando las interioridades de cada uno de los enfrentamientos semifinalistas.
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