Según informó al periódico Juventud Rebelde, en octubre del pasado año se inició el rodaje de Inocencia, una película que narrará dos historias en paralelo: la del fusilamiento, acontecido en 1871, y otra, 16 años después, cuando Fermín Valdés Domínguez emprende la búsqueda de los cuerpos para denunciar el suceso.
El personaje de Fermín Valdés Domínguez, quien también fuera acusado y cumpliera seis meses de prisión, será interpretado por el actor Yasmani Guerrero, conocido por el protagonismo en Jirafas, mientras que los papeles de los estudiantes de Medicina fusilados serán asumidos por jóvenes egresados de las escuelas de arte.
Yasmani Guerrero fue el actor que eligieron sobre todo a partir de su edad intermedia, y un aspecto físico fácil de rejuvenecer o envejecer según hiciera falta. Esa cualidad fue precisa en otros siete actores, quienes asumen sus respectivos roles en las dos etapas del relato.
El proyecto ha exigido una ardua investigación histórica, para la cual el equipo se ha apoyado en textos, cartas y prensa de la época, entre otros documentos, porque se trata de una película de ficción, que se permite ciertas libertades, a partir de hechos reales.
Con guion de Amílcar Salatti (muy conocido por participar en varias telenovelas recientes de notable calidad y en el filme Esteban) y fotografía del experimentado Ángel Alderete (Algo más que soñar, La Gran Rebelión, María Antonia, Lisanka, Ciudad en rojo) Inocencia es una producción íntegra del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos.
Como se trata de un final de historia muy conocido por todos los cubanos, el guionista tuvo que articular una historia que se moviera en el tiempo y sorprendiera al espectador y lo conquistara por su mensaje.
El filme tiene como propósito continuar acercando a los jóvenes a importantes sucesos de la historia patria, y el fusilamiento de los estudiantes de medicina está muy presente en el imaginario popular gracias a que es incidente que se estudia en los programas de estudio de historia en Cuba. Además, cada 27 de noviembre en Cuba se recuerda la injusticia cometida contra estos jóvenes inocentes.
El director se motivó para realizar este filme mientras realizaba uno de los capítulos de la serie La Historia del Arte Militar en Cuba, en el que debió investigar sobre el fusilamiento de los estudiantes. Su interés por el tema desembocó en el documental Inocencias (1992) que es precedente cercano de esta película cuya postproducción se lleva a cabo en este momento.
Entre los lugares de rodaje se encuentran la fortaleza de La Punta y el Castillo del Príncipe, el Museo de Pintura Mural y el Parque Lenin, donde se reprodujo el cementerio San Antonio Chiquito, lugar donde fueron enterrados, en fosa común, los cuerpos de los estudiantes.
En el reparto está también Héctor Noas (Los dioses rotos, Sergio y Serguei) y Yadier Fernández (Casa vieja, Larga distancia) quienes interpretan los papeles antagónicos: jefe del cuerpo de voluntarios, Felipe Alonso, y el gobernador de La Habana, Dionisio López Robert, respectivamente. El director piensa apartarse de los extremos, las sobreactuaciones y las caricaturas, para que se sienta la naturalidad en el bando de los colonizadores y el odio que los impulsa.
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