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En medio del Torneo Nacional de Ascenso, una competencia de escasa trascendencia deportiva y reciprocidad del público, al fútbol cubano le llega una noticia que puede verse –por muy inapreciable que parezca- como la luz al final del túnel inmenso en el cual vive: tiene asegurado partido en la fecha FIFA 2018.
Este año se pasa de sui generis, porque el calendario de la institución rectora del “más universal” apenas cuenta con una jornada para las selecciones. No hay mucho espacio para la preparación y la agenda anda más comprimida que de costumbre. Los clubes y sus futbolistas juegan mucho y los países y sus futbolistas se desempeñan poco.
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Si usted no lo conoce, es bueno que sepa que antes del mundial solo hay una jornada FIFA, pactada entre el 19 y 27 de marzo, menos de tres meses antes del comienzo de la cita universal, el 14 de junio. Y es que entre col y col deberán cerrar las ligas, mientras que la final de la Liga de Campeones 2017/18 acontecerá para el 26 de mayo. Después, solo después, las 32 selecciones clasificadas podrán unir a todos sus exponentes en sus cuarteles generales.
Cuba, se conoce, no estará en Rusia, pero al menos jugará el próximo 24 de marzo presumiblemente en Managua, Nicaragua. La ambición emergió de los directivos nuestros, quienes extendieron la invitación a los pinoleros y estos no la negaron.
Ildefonso Agurcia, secretario general de la Federación Nicaragüense de Fútbol, Fenifut, indicó que el desafío es casi un hecho. “Ellos nos mandaron a preguntar si estábamos disponibles y nosotros les contestamos que sí”, manifestó al diario La Prensa.
Habrá que pagarse el pasaje, correr con los gasto de alojamiento y alimentación, pero se jugará, que es, sin duda, lo más importante. “Ellos vienen pagando todo, nos pidieron que les buscáramos un hotel favorable y que les demos transporte interno y campo para entrenar, que es lo normal”, expresó el directivo.
Así que entre las patadas y los pésimos despejes que nos deja el Torneo Nacional de Ascenso, que se desarrolla en el campo La Polar y el estadio Pedro Marrero, las autoridades cubanas de la disciplina tienen un motivo para festejar.
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