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A Jacob Forever lo hemos visto sentado en el contén de una acera comiéndose una pizza de 10 pesos junto a un amigo de toda la vida. Es un muchacho sencillo al que el éxito no se le ha subido a la cabeza.
Este viernes el reguetonero cubano actuó en Castenedolo, una pequeña localidad en la provincia de Brescia, al norte de Italia. La tarima resbalaba y al artista no se le pasó por la cabeza suspender el concierto. Se quitó los zapatos y cantó descalzo.
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La anécdota la ha contado él mismo en su cuenta de Instagram. "Tuve que cantar descalzo porque el piso resbalaba, pero feliz. Recordé mucho cuando andaba así en mi reparto la Belén Camagüey cuba. Los quiero mucho. Gracias Brescia por tanto cariño. Bendiciones a todos".
Los fan del artista agradecieron el gesto: "Qué bueno que no te olvidas de tus raíces", le escribieron.
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