En la mañana de este jueves, 15 de febrero, Nikolas Cruz ―autor de la matanza de ayer en una escuela en Parkland (Florida)― fue conducido a una cárcel del condado de Broward, con 17 cargos de asesinato premeditado.
Las autoridades confirmaron que al menos 17 personas fallecieron ayer miércoles, Día de San Valentín, como consecuencia de los disparos indiscriminados de Cruz contra estudiantes del centro.
El alguacil del condado de Broward ―Scott Israel― señaló que al menos 12 de las víctimas fueron asesinadas en el interior de la escuela, otros tres murieron en el exterior y otras dos fallecieron en el hospital.
En relación con la identidad de la víctimas, las autoridades policiales han destacado que no se ha identificado aún a todos los cadáveres porque algunos no portaban documentos, y que hasta que todos los familiares no sean informados, no se publicarán nombres.
La masacre fue perpetrada por Nikolas Cruz con un rifle semiautomático estilo AR-15 y tenía numerosos recambios de municiones. En el momento de su detención, cuando fue enfrentado por agentes de la policía, no opuso resistencia.
Investigadores policiales analizan ahora páginas web que el joven visitaba así como sus redes sociales, y medios de prensa aseguran que lo encontrado es muy "inquietante".
Cruz comparecerá este jueves por la tarde en una audiencia judicial por los cargos de homicidio, dijo Constance Simmons, portavoz de la fiscalía del estado de Florida.
Según indica Reuters, se trata del segundo tiroteo más letal en una escuela pública norteamericana después de la masacre de 20 escolares y seis educadores en la primaria Sandy Hook en Newtown (Connecticut), en el 2012.
La peor tragedia en la historia de Estados Unidos, por número de víctimas, ocurrió en un centro de estudios en Virginia Tech, en 2007, donde murieron 32 personas.
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