El Departamento de Conservación del Suroeste de la Florida (Conservancy of Southwest Florida), dedicada a la conservación del agua y la vida silvestre, ha documentado una pitón birmana tragándose un ciervo de cola blanca que pesaba más que ella. Los expertos creen que es un caso único ya que es la primera vez en la que se puede documentar una relación depredador-presa de estas características en las pitones birmanas o en cualquier tipo de pitón, informa la asociación en su muro de Facebook.
El biólogo Ian Bartoszek cree que éste es un claro ejemplo del impacto negativo que las pitones birmanas están teniendo sobre la fauna de los Everglades. Los ciervos de cola blanca, explicó, constituyen la principal fuente de alimento de la pantera de la Florida por lo que su desaparición también afectaría a esta especie protegida, según publica medium.com.
El equipo de Conservancy of Southwest Florida comprobó que el cervatillo pesaba poco más de 15 kilogramos (35 libras) mientras que la pitón birmana andaba por 14,29 kg (31 libras). Esto lleva a pensar que puede atacar a los ciervos jóvenes antes de que estos logren aparearse por lo que se reduciría su población en los Everglades.
Hay estudios que responsabilizan a la pitón birmana de la desaparición de nueve de cada diez mamíferos pequeños en la zona este de los Everglades.
Conservancy of Southwest Florida estudia los hábitos de alimentación y cría de la pitón birmana en el suroeste de la Florida, en aras de encontrar soluciones que ayuden a controlar su población. Para ello han instalado chips en una veintena de serpientes macho adultas que suelen llevar a los biólogos a los sitios de cría, donde ellos aprovechan para romper los huevos.
Este proyecto se financia con aportaciones privadas.
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