Cinco embarazadas de Las Tunas han abortado luego de que se les detectaran defectos graves a los bebés que traían en camino, provocados por el zika. En esta oriental provincia cubana se ha detectado un centenar de mujeres en estado de gestación que tienen la enfermedad. Aunque parece una cifra muy alta, no es real porque muchas futuras madres optan por esconder los síntomas o no los tienen. "Nunca nos habíamos enfrentado a algo similar", asegura Nora Orive Rodríguez, jefa del Servicio provincial de Genética al diario oficialista Periódico26.
Debido al temor del contagio están siendo analizadas en Las Tunas incluso las embarazadas que viven en un radio de 300 metros del lugar donde se detecta un enfermo.
En el territorio tunero han nacido 20 niños de madres que tuvieron el zika. Sólo en dos casos se han detectado "alteraciones". Uno nació con una hemorragia de retina y otro con calcificación de la corteza cerebral. A todos se les hará un seguimiento hasta los 5 años porque pueden aparecer más problemas según vayan cumpliendo años y así se lo han explicado a las familias.
El zika está amenazando "la capacidad intelectual de las generaciones del mañana.
El diario local explica que en Las Tunas ocho de cada diez personas infectadas por el zika no saben que están enfermas. Eso hace que no se tomen la enfermedad en serio y se crean que sufren un resfriado, añade el rotativo oficialista.
El zika, insiste Nora Orive Rodríguez, no sólo se contagia a través de la picadura del mosquito sino también por medio del útero, que es la forma en que la mujer embarazada infecta al feto. También se transmite por contacto sexual. En Las Tunas han comprobado que la enfermedad se propaga además a través de trasplantes de órganos y transfusiones de sangre.
El zika, explica Rodríguez, provoca microcefalia en los fetos, defectos neurológicos que causan retraso mental, retardo en el desarrollo psicomotor, parálisis o daños en la musculatura.
Para frenar la "epidemia", la experta recomienda a las embarazadas usar el preservativo en sus relaciones sexuales hasta ocho semanas después de sufrir la enfermedad. El hombre, en cambio, debe hacerlo durante seis meses. Asimismo sugieren que no se debe abortar hasta tanto no se confirmen las malformaciones del feto.
Según esta experta, el zika está amenazando "la capacidad intelectual de las generaciones del mañana".
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