La Habana, 12 abr (EFE).- Han pasado dos años desde que el huracán Mattew arrasó Guantánamo. También han transcurrido siete meses desde que Irma arrasó la oriental provincia cubana. Sin embargo, a estas alturas quedan unas 7.000 viviendas sin reconstruir tras el paso de ambos meteoros.
La versión de los medios estatales es triunfalista y ven como un logro que más de 36.700 hogares dañados por los huracanes Irma (2017) y Matthew (2016) hayan sido recuperados en la provincia cubana de Guantánamo (este), lo que representa un 83,8 % de las viviendas afectadas en ese territorio, uno de los más castigados del país por esos fenómenos meteorológicos.
El 77 % de las casas se rehabilitaron por "esfuerzo propio de las familias afectadas, con el apoyo de vecinos y amistades" y el 23% restante por "vía estatal", informó este jueves la presidenta del Gobierno en Guantánamo, Nancy Acosta, en una nota del diario oficial Granma.
Faltan por recuperar 7.079 casas, la gran mayoría derrumbes totales y unos 300 derrumbes parciales.
Las viviendas que perdieron o sufrieron daños en los techos ya fueron reparadas en su totalidad, aseguró Acosta en una reunión con el viceministro de las Fuerzas Armadas, el general Ramón Espinosa.
Éste altpo mando del Ejército verificó la marcha de varias obras en construcciones dañadas por los huracanes, entre ellas el vial Yumurí-Jobo Claro, en el municipio de Maisí, en el que solo resta instalar las barandas de protección.
También visitó las "minindustrias" locales de producción de materiales para la construcción de esa provincia, una de las iniciativas del Gobierno cubano para paliar la escasez de vivienda, uno de los problemas sociales más sensibles en la Isla.
Dentro de su recorrido, Espinosa también tiene previsto llegar hasta la ciudad de Baracoa, la primera villa colonial fundada por españoles en Cuba, cuyo centro histórico quedó devastado tras el paso del huracán Matthew, en octubre de 2016.
Allí el general supervisará el estado del malecón de esa urbe, el puente sobre el caudaloso río Toa, el vial Neblina-Cayo Güin y varios edificios multifamiliares en construcción.
Según datos oficiales publicados en diciembre, entonces quedaban por reparar más de 239.800 viviendas dañadas por huracanes que pasaron por Cuba entre el 2012 y el 2017.
Irma, el más reciente en pasar por la isla caribeña, afectó en septiembre pasado a 12 de las 15 provincias cubanas y dejó tras de sí 10 muertos y daños económicos valorados en 13.185 millones de dólares.
El poderoso huracán provocó que se interrumpiera por primera vez el servicio eléctrico en todo el país y dañó 158.554 viviendas, de ellas 14.657 con derrumbes totales y 16.646 parciales.
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