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Delvis Denis Ramos (Camagüey, 27 de enero de 1975) es un emigrante cubano que lleva 18 años residiendo en España. A estas alturas se siente mitad cubano y mitad español. Es padre de tres niños y lleva tiempo sin ir a Cuba. Las obligaciones familiares ya no son las de antes y le cuesta más reunir dinero para viajar a la Isla desde Europa. "No viajo con frecuencia. La economía no me lo permite", dice sin rodeos.
Pero que él no vaya a Cuba no significa que quiera que nadie más regrese a ver a los suyos. "Veo muy mal a los que critican a los cubanos que regresan. Cada persona es libre de hacer con su vida lo que le apetezca en el momento que estime conveniente".
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Delvis Ramos trabaja como músico con su propia orquesta, Chocolate Son, muy conocida en la provincia española de Murcia, donde lleva años ofreciendo conciertos en bares, pubs y celebraciones de toda la región. Con CiberCuba ha hablado sobre cómo entiende él lo que significa ser cubano y vivir lejos de Cuba.
"Un cubano es optimista, dicharachero, alegre y buscador de nuevas oportunidades", comenta. En su opinión, no se puede hacer distinciones entre ser cubano y ser camagüeyano, aunque halaga a estos últimos por ser "amables, formales y muy trabajadores".
De su Cuba echa de menos la familia, los amigos, la comida, el paisaje y, sobre todo, la música. Pero tiene claro que la nostalgia no le hará cambiar la decisión que tomó de emigrar a España. "Echo de menos, pero prefiero quedarme aquí", dice.
Para Delvis Ramos, lo peor de vivir fuera de Cuba es no poder tener a la familia cerca. "Ya llevo 18 años en España. Sí, me siento un poco español, pero no reniego de mi cubanía. Yo diría que soy un 50% cubano y un 50% español".
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