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La Palma Yarey o Yarey Macho (Copernicia Fallaencis León) se encuentra en peligro crítico de extinción desde hace más o menos una década, y desde entonces se ha logrado aumentar la cantidad de árboles a unos 1 400, entre adultos, jóvenes y plántulas, que localizan casi todos en el municipio de Chambas.
El peligro de extinción de la Palma Yarey se relaciona, por supuesto, con la degradación y destrucción de su hábitat natural a causa del desarrollo de la agricultura, la ganadería y la industria azucarera, aparejado a la tal excesiva para usar la madera, o sus hojas en el techado de viviendas rurales, y la extracción de fibras para la fabricación de cepillos, escobas y jabas.
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A la acción negativa de los factores antes mencionados, aparece el insecto del orden Lepidóptero (mariposas), que perforan las diferentes capas de la semilla destruyendo el cotiledón, de modo que se imposibilita la reproducción.
Por otra parte, el desmoche de las hojas se hace difícil por el método tradicional, es decir, con un desmochador que escala la palma amarrado a ella. La dificultad proviene de la gran altura que alcanzan algunas de estas palmas, de modo que se recurre a la tala y derribo del hermoso árbol.
Entre las más de cien especies de palmas existentes en Cuba, de las cuales 90 son endémicas, la Copernicia Fallaensis es una planta de gran belleza que puede alcanzar entre diez y doce metros de altura con hojas en forma de elipse.
Desde el 2010 especialistas del Jardín Nacional Botánico de Cuba advirtieron sobre la necesidad de preservar la palma yarey o yarey macho, especie endémica de la región central del país que persiste en algunas sabanas y matorrales secundarios.
Aunque no dispone del prestigio de la Palma Real, nombrada árbol nacional en Cuba por ser la especie más notoria de sus paisajes, por su belleza, por su utilidad y por estar representada en el escudo nacional, la Palma Yarey tiene valor ornamental, y se vincula también con la belleza del paisaje sobre todo en las provincias centrales.
El yarey extraído de las hojas de esta planta se vincula a varios objetos utilitarios e incluso prendas de vestir, como el sombrero, que ha inspirado incluso algunas canciones, en particular una de la Original de Manzanillo, con un estribillo absolutamente pegajoso.
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