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Siete meses del paso del huracán Irma por Cuba, Ciego de Ávila permanece como la provincia que menos se ha recuperado del impacto del fenómeno meteorológico, y ello pese a haber sido de las más afectadas.
Un reciente reporte de un medio de prensa local destaca que esa provincia es la que menos recursos ha recibido para la recuperación, aunque enfatiza también que esa no sería esa la única causa del retraso.
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Entre las causas del fenómeno, el diario Invasor cita tres factores fundamentales:
-La falta de organización en la atención diferenciada de los casos (es decir, la definición de las fuerzas constructoras para cada modalidad: subsidio, esfuerzo propio, estatal).
-La lentitud en la tramitación de los documentos.
-El incumplimiento en la entrega de los recursos demandados.
Ello ha traído como consecuencia que de 31.540 afectaciones de diversa magnitud, solo se haya conseguido la recuperación de 13.230 casos.
Con fecha del 9 de abril, la provincia exhibía un 43,8 % de recuperación de viviendas, dato inferior a los números mostrados al concluir el primer trimestre del año por las vecinas provincias de Villa Clara (46 %) y Sancti Spíritus (54 %).
El mal resultado ha llamado la atención de autoridades de alto nivel, como el viceministro de las FAR, quien instó a las autoridades territoriales a insistir más en la eficiencia.
El primer secretario del Partido en la provincia, por su parte, ha comentado que “en esas instancias nacionales había faltado claridad en cuanto al respaldo que necesitan sus dependencias avileñas”; y ello supondría que “las demandas se han hecho correctamente pero que no han sido atendidas a buen ritmo”.
De los recursos administrados centralmente por el Ministerio de Economía y Planificación. Entre ellos tejas de fibrocemento y zinc, purling, tornillos y manto impermeabilizante, todos presentan déficits considerables, teniendo en cuenta que las entregas no alcanzan el 50 % del plan previsto.
Otra dificultad reseñada por el citado medio de prensa es que Ciego de Ávila no avanza en la reconstrucción de las viviendas afectadas con rapidez que debería, y ya eso sería un problema de organización interna.
La idea fue expuesta por el presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular y el vicepresidente del Consejo de la Administración Provincial frente a los responsables municipales, durante una reunión de trabajo que se extendió durante más de tres horas y en la “que del chequeo se pasó al llamado de atención con tono de regaño en más de una ocasión”.
El presidente de la Asamblea habría dicho: “Hay que pensar en la gente, en los niños que todavía están junto a sus familias viviendo en facilidades temporales, respirando el olor de las tejas de fibroasfalto”.
En todo caso, más allá del sucesivo traspaso del balón en la responsabilidad última del retraso en la recuperación avileña tras el paso de Irma, lo cierto es que el perjudicado siempre es el mismo: el pueblo.
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