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Comprar pollo en Villa Clara se ha convertido en una tarea engorrosa para los pobladores de toda la provincia, sin excepción.
Mientras que existen algunas comunidades a las que ese producto no llega desde hace semanas, en los municipios priorizados y la cabecera provincial una turba desesperada aguarda el surtido, y en solo minutos las neveras quedan nuevamente vacías, a pesar de que se dispuso la venta de solo 2 paquetes de pollo por cliente.
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Las afectaciones provocadas por el huracán Irma, primero, y la tormenta Alberto después, han sumido a las familias de este territorio central en un complicado trance alimentario.
Tanto es así que el gobierno provincial ha normado la venta de algunos renglones básicos en la red de tiendas recaudadoras de divisas, y establecimientos del comercio interior, además de establecer precios topados para una veintena de productos agropecuarios.
Ante la escasez de viandas, hortalizas y granos, el repliegue de las formas productivas no estatales como resultado de los topes de precios, y la insuficiente comercialización de carne de cerdo en la provincia mayor productora del país, el pollo ha sido la última carta de muchas familias villaclareñas, pero el abastecimiento ha sido insuficiente.
Los propios directivos de la Corporación CIMEX y la Cadena de Tiendas Caribe en Villa Clara reconocieron públicamente ante los micrófonos de la emisora CMHW, que se trata de una situación realmente compleja, pues ahora mismo la oferta queda muy por debajo de la demanda.
Sin embargo, y por encima de las disposiciones gubernamentales, María Eugenia Veitía directora general de CIMEX, explicó en la radio que se ha autorizado la venta de pollo por cajas, a un costo superior a los 25 CUC (625 pesos). Una cifra que ronda el al salario medio mensual del cubano y, por lo tanto, resulta prohibitiva para las mayorías.
“No hemos conseguido una permanencia del pollo en nuestros establecimientos, a pesar del esfuerzo extraordinario de nuestro aguerrido colectivo, porque es un proceso manual y complejo”, reconoció la directiva, al tiempo que dijo no ver contradicción alguna en que se comercialice por cajas en medio de la reconocida escasez del producto.
Mientras que el gobierno de la provincia impide la venta de pollo por cajas en las unidades del comercio interior, y ha impuesto multas, decomisos y retiros de patentes a trabajadores por cuenta propia si no acatan lo dispuesto con respecto a las regulaciones adoptadas, esas mismas autoridades se hacen de la vista gorda ante el paradójico proceder de CIMEX, una corporación perteneciente al holding militar GAESA, rectorado por las FAR.
Entretanto, el pueblo villaclareño que sufre la prolongada escasez del producto, debe resignarse a que el mismo pollo que no está a su alcance se venda por cajas, y a un costo realmente prohibitivo para el bolsillo común.
Algunos, como Maricel Águila, recurren a soluciones más cooperativas: “Mi hermana, dos vecinos más y yo, nos unimos para comprar una caja entre todos, porque la cosa está difícil y no hay ni salchichas, no encuentras a qué echarle mano”, explica con cierta resignación.
El propio presidente cubano Miguel Díaz Canel autorizó la semana pasada la asignación de dos libras de papas por persona en Villa Clara, y solicitó el apoyo de otros territorios del país con envíos de viandas, hortalizas y granos, para paliar la situación que hoy padece su provincia natal.
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