La obesidad es un problema de salud en Cuba, dado que el 42% de su población tiene sobrepeso, informó la emisora Radio Rebelde. De ese grupo, el 13% del total son niños.
Lilian Valdivia García, jefa del grupo de apoyo nutricional del Centro Nacional de Cirugía de Mínimo Acceso, explicó que de no tomarse medidas, esos menores transitarán su adolescencia con obesidad y llegarán a la adultez con factores de riesgo para sufrir padecimientos como la hipertensión, la diabetes y la hipercolestoremia (aumento de las grasas).
“Muchos pacientes que acuden a nuestras consultas con estas enfermedades responden de forma favorable con un plan de dieta que les hace bajar de peso; con ello compensan su diabetes o dejan de serlo, y otros eliminan la hipertensión”, reveló.
La especialista aseguró que la obesidad debe prevenirse desde la infancia.
“A la hora de la merienda en vez de comer una galleta, le pueden dar al niño una fruta que lo nutre y a la vez le aporta minerales y vitaminas, necesarios para su crecimiento y desarrollo. No es que no coman confituras, pero solo un día, sin que sea la esencia de su dieta. Por lo general los padres acostumbran a darles calorías vacías: refrescos, dulces o caramelos”, dijo.
Para la doctora una dieta equilibrada debe priorizar en primer lugar los cereales y las frutas; después, los vegetales; a continuación las proteínas, que aportan los aminoácidos esenciales; en cuarta posición, los lácteos, y en último lugar están las proteínas vacías: las confituras.
Según la especialista, la población tiene el falso concepto de que sólo la carne es proteína. “Proteína es también un plato de arroz con frijoles, porque las leguminosas lo son. El huevo es la proteína de más alto valor biológico que existe. En ocasiones se va al mercado y en vez de comprar frutas y vegetales, se eligen calorías vacías y otros productos que no aportan al organismo vitaminas u otros nutrientes necesarios”, acotó.
El índice de masa corporal normal de una persona debe de encontrarse entre 18.5 y 24.9. Si está por encima de 25 y 29.9 se dice que el paciente tiene sobrepeso, y por encima de 30 es considerado obeso. Cuando está en 40 la persona presenta súper obesidad.
La mala nutrición de los cubanos es debido a la escasez de los productos y a sus altos precios. Consumir proteína animal o sus derivados es una odisea. La carne de cerdo es la más asequible, lo que no significa que sea barata. La de res es prohibitiva, y en algunos lugares se ha vendido a 52 CUC el kilo, en un país donde el salario medio es de 740 pesos cubanos (CUP), equivalentes a 29,6 CUC.
La producción de alimentos no acaba de despegar. La avicultura, por ejemplo, aporta en este momento un poco más de 5.8 millones de huevos diarios, cifra que ni de lejos alcanza a cubrir la demanda. Y para comer papa, tubérculo básico en la mesa del cubano, hay que sufrir largas esperas y multitudinarias colas.
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