La nueva sensación del deporte cubano, el saltador Juan Miguel Echevarría, se retiró de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla, tras resentirse de una lesión, a pocos minutos del inicio del salto de longitud masculino.
Echevarría, de solo 19 años, era el máximo favorito a la medalla de oro en una modalidad que lo tiene en la cima del ranking mundial, con marca de 8.68 metros.
El joven, monarca del orbe bajo techo, arrastra una ligera molestia, la cual le impidió competir en la parada de la Liga del Diamante en Londres, el pasado 22 de julio. Se trata de una pequeña contractura en una de sus piernas.
Esta temporada el antillano alcanzó un brinco de 8,83 (viento de +2,1 metros por segundos), que de haber sido homologado sería el quinto mejor de todos los tiempos.
Sin dudas, el público presente en el estadio Rafael Cotes perdió la posibilidad de observar a un verdadero fenómeno del atletismo universal. Cuba, en cambio, se quedó sin uno de sus títulos más seguros en la cita multideportiva regional.
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