El gobierno del presidente Donald Trump ha presentado este jueves una nueva regulación que restringiría las peticiones de asilo y posibilitaría deportar de manera más rápida a las personas que entran ilegalmente al país
La nueva medida prohibiría a los migrantes que cruzan de manera irregular solicitar asilo luego de entregarse a algún agente de la patrulla fronteriza. Solo podrán hacerlo quienes llegan a los puertos oficiales de entrada.
"Hoy (jueves), utilizamos la autoridad que nos dio el Congreso para prohibir (el acceso) a los inmigrantes que violan cualquier suspensión presidencial sobre llegadas (al país) u otra restricción para poder ser elegido asilado", aseguraron en un comunicado la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, y el fiscal general interino, Matt Whitaker.
Medios locales refieren que la orden será firmada este viernes y que en ningún caso tendrá efectos retroactivos.
"La norma otorga la autoridad... para eliminar la elegibilidad para asilo a aquellos inmigrantes que se vean afectados o que vulneren una suspensión o limitación para acceder a Estados Unidos a través de la frontera con México y que esté impuesta por proclamación presidencial", precisó un alto funcionario del Gobierno en rueda de prensa.
"Lo que estamos tratando de hacer es canalizar (...) las solicitudes de asilo a través de los puertos de entrada donde tenemos mejores recursos, capacidad y personal para manejar esas solicitudes de manera expedita y eficiente", agregó.
Trump ha dicho que los migrantes que llegaban irregularmente a través de México pedían asilo para evitar que los deportaran y después intentaban resolver su situación en libertad.
Generalmente las autoridades migratorias liberan a los migrantes durante el proceso por la falta de espacio en los centros de detención pero estos, según el presidente, se pretenden ampliar.
"Nuestro sistema de asilo está abrumado con demasiadas solicitudes sin mérito de extranjeros que generan una gran carga sobre nuestros recursos, lo que nos impide otorgar rápidamente asilo a quienes realmente lo merecen", explica el comunicado.
Según datos de la Oficina de Revisión de Casos de Inmigración (EOIR) citados por Univision Noticias, a finales de junio las cortes de inmigración tenían pendientes más de 740,000 expedientes o casos de solicitudes de asilo.
Las nuevas regulaciones facilitarían que las personas que entren por puntos autorizados tengan una deportación inmediata y, en el caso de los reincidentes que ya han sido deportados, enfrenten hasta un año o más en una prisión federal.
La noticia sale a la luz una semana después de que el presidente anunciara planes para restringir el asilo a los migrantes de la caravana de centroamericanos que se dirige hacia Estados Unidos.
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