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Amauris Beritan Torres, colaborador cubano en Brasil, aseguró que “jamás aceptaría el asilo político de ese país”. Según él, no es correcto que criticaran a los profesionales de la Isla.
Beritan, de 31 años, es uno de los más de once mil profesionales de la salud que el Gobierno de Miguel Díaz-Canel ha retirado de Brasil. Las autoridades de la Isla no aceptaron las condiciones del nuevo presidente, Jair Bolsonaro.
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El recién electo mandatario exigió Cuba pagar el salario íntegro a sus profesionales del Programa Mais Medicos, realizar exámenes de reválida de los títulos y que el Gobierno de la Isla le permitiera, a quienes lo desearan, vivir con sus familias durante la estancia en Brasil.
La respuesta de Cuba, que ingresaba millones de dólares anuales solo con los médicos que exporta a Brasil, fue tajante. Lo cancelaron y anunciaron que antes de que finalice el año estarán todos de vuelta.
Bolsonaro, por su parte, dijo que permitiría a los cubanos solicitar refugio político en caso de querer quedarse en Brasil. Varios de ellos han comentado a CiberCuba, en condición de anonimato, estar muy descontentos con la noticia de la retirada.
Aunque algunos de ellos refieren estar indecisos y confundidos con toda la situación, otros como Beritan Torres, creen lo contrario.
“Yo hasta el último día de trabajo en este país voy a seguir dando lo mejor de mí como médico y como ser humano. Ustedes pacientes, amigos y compañeros de trabajo merecen”. La prensa oficialista, con su acostumbrada propaganda, ha tomado sus palabras como ejemplo del supuesto sentir general.
Hoy llegó a Cuba el primer grupo de los médicos cubanos. “Les damos la bienvenida a la Patria, a un bastión del coraje y los principios, para todos los médicos y profesionales internacionalistas que cumplen misión en Brasil y en otros países”, les dijo la viceministra de salud de la Isla, Regla Angulo Pardo.
La funcionaria había participado horas antes en la Mesa Redonda donde explicó que “Cuba presta servicios médicos en la mayoría de los países sin recibir dinero, y lo que se hace es compartir los gastos. Que a nadie le quepa duda, la inmensa mayoría de nuestras misiones son de carácter solidario e internacionalista. Tenemos en las venas ese principio que inculcó la Revolución: hay que prestar el servicio allí donde lo necesiten”.
No obstante la exportación de profesionales de la salud es uno de los principales renglones de la economía y durante años los médicos han denunciado cómo viven en condiciones de precariedad en las misiones cobrando salarios muy bajos porque el Gobierno se embolsilla el mayor porciento.
Los miles de profesionales del programa Mais Medicos en Brasil deberán llegar a la Isla antes de finales de año, en vuelos organizados por el Gobierno.
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