La Habana, 17 nov (EFE).- El humor resiliente de los cubanos y la creatividad de la marca de ropa "Clandestina" han convertido al T-Rex que aparece cuando el navegador Google Chrome pierde la conexión en un criollo "Clandes-dino", la mascota de la Cuba que anhela un Internet libre y rápido.
Lo que empezó como una manera de poderse "relajar" ante la imposibilidad de conectarse a la red en Cuba y una reflexión sobre el aislamiento para la diseñadora Idania del Río, se ha transformado en el leitmotiv que protagoniza ahora la pasarela "País en Construcción", presentada esta semana en La Habana.
El pequeño dinosaurio pixelado adorna camisas, pantalones y monos de una colección hecha "para la calle" y con la "mentalidad de reciclaje" de "Clandestina", la primera tienda de diseño cubana y también la primera en vender sus productos en la web desde la isla.
Junto al "Clandes-dino" y siguiendo la misma alegoría a la avidez de los cubanos por Internet, la línea incluye telas estampadas con conos de construcción diseñados a modo de juego con el símbolo del wifi, al que los isleños pudieron acceder en 2015 cuando el Gobierno abrió por primera vez puntos públicos de conexión.
Cubrebocas con brillantina, cascos y las bolsas "vintrashe" de "Clandestina" fueron los únicos accesorios de la pasarela, que mostró además varias piezas de impacto como un vestido fabricado solo con guantes de obrero, otro con bolsas negras de basura y un traje de novia con un tocado hecho del armazón de una máscara de protección.
"Es maravilloso poder ver en físico los diseños que tienes en la cabeza. Ha sido muy difícil. Esta es la primera colección que muestra un diseño diferente, un producto diferente de lo que hacemos habitualmente", dijo a Efe Del Río, que colaboró en la colección con los diseñadores Celia Ledón y Gabriel Lara.
Para Ledón, una de las diseñadoras de vestuario más reconocidas del país, "País en construcción" también es una muestra de "creatividad con lo que hay, con lo que se puede", algo que refleja el "resolver" del difícil día a día del cubano, que "siempre está construyendo algo".
Google, el "padre" del personaje que lo inspiró todo, también se involucró en la pasarela y colaboró por primera vez con una marca cubana, inspirado por el espíritu emprendedor y de orientación social de "Clandestina".
"Para nosotros, 'Clandestina' representa lo que es posible hacer en Cuba (...) Nos gusta mucho lo que hacen con el dinosaurio de Chrome y su trabajo se ajusta muy naturalmente a la conexión que tratamos de establecer aquí", explicó la jefa de Marketing de Google Cuba, Susanna Kohly Jacobson.
La compañía estadounidense fue una de las primeras en expresar interés en asociarse con el Gobierno cubano para mejorar el acceso a Internet en la isla tras el "deshielo" bilateral con Estados Unidos, y espera en el futuro poder hacer mucho más en el país, donde su presencia aún es muy limitada.
Kohly Jacobson precisó a Efe que a Google le gustaría tender un cable submarino hacia Cuba para mejorar la conexión a Internet y el acceso a los contenidos en la web.
En esto último vienen trabajando desde 2016, cuando firmaron un acuerdo con la isla para facilitar acceso a los servidores que almacenan contenido de portales populares como Youtube y Gmail.
A pesar del éxito de su mascota, en "Clandestina" sueñan con el día en que se "extinga nuestro querido dino" y por fin la isla deje de ser uno de los países más desconectados del mundo.
"Lo que queremos es Internet y Google está haciendo esfuerzos por traerlo a Cuba. Creo que la Internet es muy importante para todos y principalmente para los emprendedores cubanos. Sin conexión nunca hubiéramos podido abrir nuestra tienda online", insistió Del Río.
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