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Para el derecho Rodry Yasmani Castelló nada ha sido fácil desde que emigró de Cuba en 2015. El lanzador de 6.2 pies y natural de Pinar del Río, posee condiciones innatas para entrar en el sistema de MLB y buscar el sueño de llegar a Grandes Ligas. Sin embargo, la suerte le ha golpeado en su estancia en Quisqueya.
"Este mes empecé a bajar la carga física para ver si la velocidad la aumento y sobrepaso las 95 millas", le dijo a CiberCuba el cubano de 24 años.
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Su estatura y su recta sostenida entre 93 y 94 millas, además de una slider con reconocido efecto, deberían al menos otorgarle un contrato de liga menor que lo llevé a insertarse en el profesionalismo.
Por el momento las negociaciones siempre se han congelado por alguna vía. Castelló salió de Cuba en septiembre de 2015, dejando atrás a su familia y a su equipo de los Vegueros de Pinar del Río, donde se encontraba como prospecto élite.
En la Serie Nacional 54 lanzó en 11 encuentros y dejó marca de 1-1, 4.64 de efectividad, victoria que consiguió ante los Cocodrilos de Matanzas en un partido transmitido por la Televisión Nacional.
Los meses siguientes serán determinantes para el cubano. Solo queda por ver si se mostrará la sexta herramienta del béisbol: la suerte.
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