La Isla de la Juventud registró en 2018 alrededor de 1.200 abortos frente a 900 nacimientos, informó este jueves la Agencia Cubana de Noticias.
Al número de interrupciones del embarazo se agregan otras 1.500 regulaciones menstruales, un procedimiento que se realiza en las primeras seis semanas de embarazo, y mediante el cual se aspira el útero, sin anestesia general ni transfusión de sangre.
Abel García Valdés, jefe de servicios de ginecoobstetricia del Hospital General Docente Héroes del Baire, explicó que la alta incidencia de abortos en un territorio donde viven 85.000 personas, se debe al “desconocimiento” de sus efectos negativos en la población, “sobre todo en las adolescentes”.
Según el especialista, hay personas que usan esa técnica como método anticonceptivo, sin tomar en cuenta sus efectos adversos sobre la salud reproductiva de las mujeres.
De hecho, la práctica “es la primera causa de infertilidad en la mujer, cuyas consecuencias aparecen después de los 35 años, cuando se ven imposibilitadas de tener hijos”, dijo.
En 2016 Cuba registró una tasa de mortalidad materna –debido a abortos– de 4,3 por cada 100.000 nacidos vivos; aunque particularmente en la Isla de la Juventud ninguna mujer falleció por esta razón.
García Valdés señaló la necesidad de “hacer estudios multidisciplinarios sobre el tema”, de conjunto con los actores sociales relacionados con la atención a las féminas.
En la Isla el aborto es legal, libre y gratuito desde 1965, cuando el gobierno legisló su práctica a solicitud de la Federación de Mujeres Cubanas.
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