La música latina estuvo representada por todo lo alto en esta edición 61 de los premios Grammy con las actuaciones de la cantante cubana Camila Cabello, el puertorriqueño Ricky Martin, el colombiano J Balvin y el trompetista cubano Arturo Sandoval.
La explosiva presentación comenzó con el tema Havana, el gran éxito de Camila, que hizo gala de su talento en medio de una imponente y colorida escenografía y acompañada de Young Thug. Luego apareció Ricky Martin luciendo un impecable traje blanco y exhibiendo su nuevo look sobre el escenario para cantar Pégate, acompañado de la trompeta de Sandoval.
En medio del show comenzó a escucharse el inicio de Mi Gente, uno de los grandes éxitos de Balvin, quien estuvo sentado en un banco cubriendo su cara con un periódico como parte de la escenografía.
La presentación alcanzó su clímax y cerró nuevamente con Havana. El público mostró la gran aceptación del show con fuertes aplausos y ovaciones.
Para muchos, la actuación de Camila, que estuvo nominada a Mejor Interpretación Vocal Pop Solista y Mejor Álbum Vocal Pop, aunque no se llevó ningún gramófono, fue considerada la mejor de la noche. Además, fue una de las mejor vestidas de la alfombra roja, donde deslumbró con un vestido rosa.
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