El presidente español, Pedro Sánchez, ha convocado elecciones anticipadas en España para el próximo 28 de abril. La noticia, anunciada este viernes, deja en el aire la aprobación de la Ley de Nietos, que permitiría la nacionalización de descendientes de padres españoles que residen en el extranjero.
La Ley de Nietos viene a ser como una extensión de la Ley de Memoria Histórica que abrió la puerta a que cerca de 150.000 cubanos consiguieran la nacionalidad española desde 2007. De esta forma, la Isla se convirtió en el sexto país del mundo con mayor número de españoles.
Para que las elecciones se celebren en España el próximo 28 de abril las cámaras alta y baja deberán disolverse antes del 5 de marzo. Eso significa que la Ley de Nietos sólo podría salir adelante si se aprobara antes de esa fecha.
El 18 de junio de 2018 el Senado español aprobó la Proposición de Ley 122/55 en materia de concesión de la nacionalidad española a descendientes (Ley de Nietos), que busca reparar situaciones injustas que se dieron durante la aplicación de la Ley de Memoria Histórica. En esencia permitiría coger la nacionalidad española a las personas que cumplan cualquiera de estos requisitos:
1.-Nietos de españolas casadas con un cubano (o con cualquier otro extranjero) antes de la entrada en vigor de la Constitución española de 1978 ya que hasta ese momento, las españolas perdían la nacionalidad al contraer matrimonio con un extranjero.
2.-Familiares de padres españoles que no consiguieron la nacionalidad cuando se puso en marcha la Ley de Memoria Histórica por motivo de la edad.
3.-Nietos de emigrantes españoles, que salieron de España por motivos económicos, y perdieron su nacionalidad española antes de que nacieran sus hijos.
4.-Nietos de españoles que tenían la nacionalidad española siendo menores de edad, pero la perdieron al ser mayores por no ratificarla.
En principio la Ley de Nietos debía haber salido adelante este año. Fue una propuesta de Izquierda Unida, que llegó al Senado a propuesta de la coalición Unidos Podemos-En Comu Marea en diciembre de 2016.
Con la convocatoria a elecciones, Pedro Sánchez cierra un gobierno de apenas ocho meses, que incluyó una visita histórica a Cuba. Es el primer presidente que consigue gobernar en España a través de una moción de censura. Los nacionalistas catalanes le dieron la espalda a la aprobación de sus presupuestos generales y el gobernante socialista dio por terminado su mandato.
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