Dos líderes cubanos de la segunda caravana de migrantes centroamericanos que partieron el pasado 30 de marzo de la ciudad mexicana de Tapachula, Chiapas, rumbo al norte de la frontera con Estados Unidos se encuentran desaparecidos.
Ariel Guerra, mejor conocido como “El Abuelo”, y otro isleño -no identificado- son cabecillas del grupo que desde hace dos semanas se encuentra estacionado en Mapastepec, una localidad en la zona sur del propio estado de Chiapas.
De acuerdo con reportes del diario Quadratin, los cubanos junto con otros dos líderes de nacionalidad hondureña habían sido convocados por la Policía Federal y el Instituto Nacional de Migración (INM) a una reunión. Sin embargo, desde su salida no se han obtenido noticias de ninguno de ellos.
Se conoce que “El Abuelo” y el otro cubano partieron del campo de fútbol donde se encuentra la segunda caravana y se dirigieron al Centro Deportivo, actual alojamiento del primer grupo. Los indocumentados tenían prevista un encuentro con funcionarios mexicanos, pero al no saber de su paradero se teme que hayan sido detenidos y trasladados a otra localidad.
Los cubanos se unieron a la segunda caravana después de haber esperado más de un mes por el salvoconducto que le debían haber entregado las autoridades migratorias del territorio.
Cansados de tanto aguardar y desesperados por la precaria situación en que estaban viviendo, decidieron avanzar a Mapastepec y unirse a la primera caravana de cubanos y centroamericanos que salió el 23 de marzo. El grupo compuesto por casi 500 extranjeros estaba siendo acompañado por autoridades policiales.
La posible desaparición de estos dos cubanos se produce tres día después del arresto de Mikel Hernández Figueroa, médico y líder también de la caravana.
El galeno fue arrestado el miércoles por agentes de seguridad, para luego ser trasladado a la Estación Migratoria Siglo XXI de Tapachula.
Hernández Figueroa, neurólogo de especialidad, desertó de la misión oficial en la que estaba en Ecuador, y se convirtió en los últimos tiempos en el guía de más de 2.700 indocumentados. Fuentes migratorias han indicado que el médico será deportado en los próximos días a su país de origen por permanecer de forma irregular en México.
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