Vídeos relacionados:
CIUDAD DE MÉXICO, 21 mayo (Reuters) - La delicada situación que atraviesa Venezuela se ha agravado en las últimas semanas y podría estar llegando a su punto de ebullición, dijo el martes a Reuters Maximiliano Reyes, encargado de las relaciones diplomáticas de México para Latinoamérica y el Caribe.
Venezuela sufre una aguda crisis política y económica que se ha exacerbado desde enero cuando, invocando a la Constitución, el opositor Juan Guaidó fue proclamado presidente interino del país argumentando que la reelección del presidente Nicolás Maduro estuvo cargada de irregularidades.
Lo más leído hoy:
Desde entonces, Guaidó -quien ha sido reconocido por más de 50 países- ha buscado la renuncia de Maduro y a fines de abril llamó a su "cese definitivo". Sin embargo, su convocatoria no tuvo el eco deseado y Maduro, quien mantiene el control de las fuerzas armadas, la calificó como un "golpe de Estado".
"La situación, en general, se ha agravado, la situación política, la situación humanitaria, la situación diplomática", dijo Reyes, subsecretario para Latinoamérica y el Caribe de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México.
"Vemos con preocupación que la liga está a punto de romperse y eso, sin duda, derivaría en una situación violenta que nadie quiere", agregó Reyes. "Ahora las cosas están llegando a un punto en que, ahora sí, es necesario tomar los temas con seriedad; sobre todo por parte de las partes involucradas".
Desde que el izquierdista Andrés Manuel López Obrador asumió como presidente de México en diciembre, la política exterior del país latinoamericano se ha centrado en la solución pacífica de controversias y no intervención en los asuntos externos.
Incluso México se ha propuesto como garante para una posible negociación entre el gobierno de Maduro y la oposición. En días recientes, ambas partes retomaron acercamientos en Noruega y Reyes, de 43 años, reveló que México estuvo al tanto de las pláticas y que las ve con "simpatía".
"En el caso de Venezuela, no intervención no significa indiferencia ni ignorancia", explicó Reyes en su oficina ubicada en el centro de la populosa Ciudad de México. "La participación de México ha tenido como propósito fundamental: generar una condición de confianza, de seriedad, de respeto, para que el diálogo entre las partes se pueda dar en algún momento".
Reyes, un economista con estudios de posgrado en administración pública, aseguró que México "no piensa" salirse del Grupo de Lima pese a que no ha estado de acuerdo con sus resoluciones recientes, que han condenado a la administración de Maduro.
NICARAGUA EN LA MIRA
A pesar de la inquietud por la situación en Venezuela, Reyes aseguró que México está más preocupado por lo que sucede en Nicaragua, donde el presidente Daniel Ortega enfrenta su peor crisis política desde que retomó el poder luego de masivas protestas de quienes exigen su renuncia.
"La relación con Nicaragua es mucho más cercana (que con Venezuela). México es el segundo inversionista en Nicaragua, hay más de 40 empresas mexicanas en Nicaragua, todo eso nos obliga a estar más pendientes, más ocupados (que en Venezuela)", confesó.
A pesar de ello, México no se ha involucrado frontalmente en el diálogo entre el gobierno de Ortega y la oposición que busca liberar a cientos de "presos políticos" y adelantar las elecciones presidenciales, pautadas para 2021.
"No hemos sido indiferentes y no nos mantendremos indiferentes (pero) no ha habido una petición formal de ninguna de las dos partes (para que México se una al diálogo)", dijo Reyes.
(Reporte de Diego Oré. Editado por Pablo Garibian)
Archivado en: