La construcción de la Avenida Patria, vial que conectó La Plaza de la Revolución Antonio Maceo con el Cementerio Santa Ifigenia, fue una de las principales obras constructivas llevadas a cabo en de Santiago de Cuba como parte del 500 aniversario de esa ciudad, y es considerada una hazaña de la ingeniería en esa oriental provincia.
Sin embargo, muchos santiagueros no estarían de acuerdo con esas valoraciones, ya que los inadecuados procedimientos que acompañaron la construcción del viaducto son los causantes de la tragedia que ahora mismo padecen varios vecinos.
En efecto, no pocas familias del barrio Yarayó, en esa ciudad oriental, padecen las consecuencias de la obstrucción de la red de alcantarillado, motivo por el cual ahora mismo sus viviendas se filtran con aguas pútridas.
Para dar cuenta de tan terrible situación escribió al semanario Sierra Maestra Yasmina Quiroga Reyes, residente en la Calle 1ra. # 107 ½ entre Calle 6ta. y la mencionada Avenida Patria. Ella declara estar desesperada ante una tragedia de larga data, y que hasta el momento no ha sido solucionada por las autoridades competentes.
"Estamos conviviendo con una situación desesperante, la tupición de los alcantarillados ha provocado filtración de agua albañal en el interior de nuestras viviendas”, explicó la remitente.
Asimismo, da cuenta de las repetidas denuncias que ha cursado a la dirección provincial de Acueducto y Alcantarillado, y la infructuosa intervención de los operarios:
“Nos dirigimos a la dirección distrital de Aguas Santiago y nos dicen que van a enviar el carro para que destupan. El carro ha venido en dos ocasiones, pero no han podido destupir del todo pues dicen que durante el proceso de reconstrucción de la Avenida se obstruyó la tubería de desagüe principal, lo que ha traído como consecuencia que esa agua con fetidez filtre dentro de las casas”, explicó Quiroga Reyes.
A pesar del alto riesgo sanitario que implica la situación para los vecinos afectados, las autoridades de salud pública han limitado a tramitar la queja planteada por los residentes en Yarayó.
"Esta situación la informamos a la subdirectora municipal de Higiene y Epidemiología, la cual dijo haber tramitado la queja a las entidades pertinentes y que no podía hacer más nada”, argumentó la remitente en su misiva a Sierra Maestra.
Al parecer la situación solo podría resolverse rompiendo el pavimento de la Avenida Patria, y corrigiendo los desperfectos de esa “hazaña de la ingeniería” como la describió en sus páginas el propio periódico Sierra Maestra, el 4 de diciembre de 2016.
Con cerca de tres kilómetros de extensión y a un costo superior a los 6 millones de pesos la Avenida Patria fue asumida fundamentalmente por el Contingente José Maceo, perteneciente a la Empresa de Obras ingenieras #24, desempeño reconocido por las autoridades gubernamentales de la provincia. Sin embargo, los vecinos de Yarayó sufren filtraciones albañales desde entonces.
"Los que vinieron plantearon que se debía romper la calle para resolver el problema, pero no estaban facultados, pues necesitaban un permiso de otra entidad. Entre una cosa y otra el permiso no llega, la situación no se resuelve, el mal olor persiste y la casa continúa inhabitable”.
"Considero que esta situación amerita una urgente respuesta, pues está en juego la salud de muchas personas", concluyó la remitente.
Hoy Santiago de Cuba es una de las provincias con mayores dificultades en el tratamiento de aguas residuales, el propio semanario Sierra Maestra daba cuenta en la propia edición de este sábado 1 de junio otra queja, cursada por George Ochoa Rodríguez, vecino del centro urbano Abel Santamaría, pues las aguas albañales llegaban hasta la bañadera y el fregadero de su vivienda.
El 27 de octubre de 2018 el semanario santiaguero daba cuenta de la situación de insalubridad que padecían los residentes en Los Nuevos Pinos, una barriada de más de 900 viviendas, y donde no pocos vecinos hacían sus necesidades fisiológicas en bolsas de nylon y las botaban a la calle, debido a la obstrucción del sistema de alcantarillado desde hace 20 años.
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