La joven norteamericana, Jordan Lindsey, falleció este miércoles tras haber sufrido el ataque de tres tiburones tigres mientras buceaba en las inmediaciones de Rose Island, en Bahamas.
La joven, de 21 años y residente en Torrance (California), se encontraba disfrutando de unas vacaciones familiares.
Medios locales indican que los padres de Lindsey y otros miembros de la familia vieron a los tiburones acercarse y le gritaron, pero ella no escuchó la advertencia a tiempo.
Oficiales de Bahamas han declarado a la agencia AP que Lindsey fue atacaba en brazos, piernas y glúteos, y que su brazo derecho fue cortado.
Timothy Law Synder, presidente de la Universidad Loyola Marymount, donde Lindsey era estudiante de Comunicación, ha dicho que la joven era "devota amante de los animales y defensora del cambio climático".
La familia ha abierto una cuenta en la plataforma de recaudación Crowfunding con el fin de reunir 25 mil dólares para cubrir el costo del traslado del cuerpo de la joven de vuelta a Estados Unidos.
El Ministerio de Turismo y Aviación de Bahamas expresó sus condolencias a la familia en un comunicado, y dijo que los funcionarios investigan el incidente. Tras el ataque una agencia gubernamental ha emitido "advertencias preventivas para el público".
Los tiburones tigre se consideran el tiburón más peligroso del mundo después del gran tiburón blanco y el segundo solo en ataques fatales registrados en humanos.
Deben su nombre a las franjas oscuras en su cuerpo como el patrón de un tigre. Pueden llegar a medir más de 16 pies de largo, pero generalmente alcanzan los 13 pies. Viven en aguas tropicales y templadas.
Medios de prensa destacan que sería la primera muerte relacionada con tiburones en las Bahamas en más de 10 años.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: