Realizadores hablan sobre la legalización del cine independiente en Cuba

Las mayores preocupaciones en torno a este decreto están relacionadas con la censura de las obras y los artistas.

Cine 23 y 12 en La Habana © CiberCuba
Cine 23 y 12 en La Habana Foto © CiberCuba

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Este artículo es de hace 5 años

Varios realizadores han opinado en las redes sociales sobre el Decreto 373 'Del Creador Audiovisual y Cinematográfico Independiente', que entrará en vigencia en septiembre, y legaliza a los cineastas y productores independientes ante el Estado cubano, aunque no constituye una Ley de Cine, como la han reclamado durante mucho tiempo los realizadores del país.

Este decreto "reconoce, en primer lugar, la condición laboral de creadores cinematográficos y audiovisuales independientes", algo que se venían reclamando también desde hace años en Cuba.


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Aunque muchos ven de modo favorable el espacio abierto para la producción cinematográfica independiente en la Isla, también otros se muestran escépticos y preocupados por cómo funcionará el Registro del Creador Audiovisual y Cinematográfico Independiente y el Fondo de Fomento del Cine Cubano, dos de las nuevas instancias lanzadas bajo este decreto.

Joseph Ross, uno de los creadores audiovisuales de más éxito en el país, expresó que la nueva regulación establecía, en principio, mejores condiciones para producir, pero “habrá que ver quiénes deciden sobre los contenidos, quiénes y con qué calidad de gestión harán esos servicios en las oficinas de apoyo al creador audiovisual”.

Por otra parte, Claudia Calviño, productora reconocida en el mundo del cine joven cubano, que ha trabajado en filmes como “Juan de los muertos” y “Santa y Andrés”, mostró sus dudas: “Hay cosas positivas en las regulaciones, hay otras con las que no estoy de acuerdo. En todo caso siento que es pronto para evaluar”.

Las mayores preocupaciones en torno a este decreto están relacionadas con la censura de las obras y los artistas, porque el ICAIC y el ICRT siguen siendo los órganos rectores de la producción cinematográfica y televisiva.

También, diferentes voces del gremio se preguntan quiénes decidirán y bajo qué criterios se seleccionarán los trabajos que se beneficiarán de los fondos estatales.

¿Qué pasaría si una nueva película resulta “incómoda” para la política gubernamental?, se pregunta Gustavo Arcos, crítico de cine cubano.

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