Un nuevo proyecto de Ley de Símbolos Nacionales fue debatido esta semana por los diputados de la Asamblea Nacional cubana.
Según el portal oficialista Cubadebate, la norma busca solucionar la contradicción que existe entre lo que establece la ley vigente y el uso práctico que hace la ciudadanía de dichos símbolos.
Para resolver tal dilema, los congresistas abogaron por un reglamento que flexibilice su uso a la vez que mantenga el respeto hacia ellos, como representación de la nación.
Se trata de “alcanzar una ley que favorezca la mayor presencia de los símbolos nacionales en la sociedad, en un ambiente de orden y de respeto a lo normado”, señaló el dictamen emitido.
En marzo se dieron a conocer detalles del proyecto legal. Se dispuso, por ejemplo, que la bandera tendrá dimensiones específicas según su uso, que podrá izarse en las noches y que se permitirá utilizar en prendas de vestir con ciertos límites: nunca en ropa interior o de baño, ni en pantalones, sayas o pañuelos de bolsillos. Y siempre irá en la parte delantera de la ropa.
El escaso tributo que muestra parte de la población cubana al Himno Nacional, la bandera y el escudo, ha sido denunciado por algunos intelectuales.
En octubre de 2018, durante las celebraciones por el Días de la Cultura cubana, la directora coral Digna Guerra mostró su preocupación en el Noticiero de televisión por lo mal que se cantaba el Himno en los matutinos de varias escuelas que había visitado.
De acuerdo a su testimonio, los niños en lugar de cantar, recitaban.
Con la nueva ley que debe aprobarse, se permite confeccionar la bandera nacional con otros tejidos, lo cual persigue abaratar su elaboración para que sea más fácil su adquisición por las personas naturales o jurídicas.
También se fija la obligatoriedad de incorporar a los planes docentes, la historia y el respeto de los símbolos patrios.
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