Un grupo de 62 cubanos que están recluidos en un centro de detención del Instituto Nacional de Migración (INM) en Janos (Chihuahua, México) iniciaron una huelga de hambre el lunes al mediodía.
Según informa un medio local mexicano, los migrantes cubanos acusan al centro de tenerlos en condiciones de hacinamiento, con carencia de servicios médicos básicos y bajo situación de acoso, maltrato psicológico y privación ilegal de libertad.
El grupo alega también el suministro de alimentos en mal estado. Los cubanos han denunciado que el sábado les dieron arroz crudo para comer y que a casi todos les provocó diarrea y vómitos.
Afirman que la determinación de iniciar la huelga de hambre surgió después de la intoxicación alimentaria, y que tienen miedo de volver a comer lo que les llevan, porque los alimentos ni siquiera los cocinan ahí.
“No estamos comiendo ni vamos a comer. Podemos estar un mes aquí y morirnos, pero no vamos a comer”, aseguró a la prensa local uno de los migrantes retenidos en la estación de Janos.
“Ninguno somos delincuentes. Salimos de Cuba buscando libertad y aquí nos tienen encerrados”, añadió otro migrante.
El citado medio indica que al menos la mitad de los detenidos en la estación migratoria de Janos fueron conducidos al centro el 25 de junio, tras haber sido interceptados en una carretera mientras viajaban en un autobús con destino a Ciudad Juárez.
Sin embargo, los cubanos alegan que llevan ya más de 40 días recibiendo malos tratos por parte de los empleados de la institución migratoria.
Aseguran que les han negado hacer llamadas telefónicas para comunicarse con sus familiares y que carecen de medicinas y de productos básicos de higiene.
Jorge Vázquez Campbell, abogado que lleva los casos de al menos una docena de ellos, dijo que busca que las autoridades liberen a los cubanos a través de un juicio de amparo tramitado ante el Séptimo Juzgado de Distrito, ubicado en Ciudad Juárez.
El abogado indica que los mantienen privados de la libertad de manera ilegal y que además violan sus derechos humanos fundamentales al no permitirles ni tan siquiera salir en libertad bajo el pago de una fianza.
Ha precisado que la Comisión Mexicana de Ayuda a Repatriados (Comar) intervino en el caso, pero que está violando el proceso para determinar admitirlos como refugiados en México.
“El proceso que deben seguir es otorgar dos entrevistas médicas y de salud y que muestren las razones para solicitar el asilo. Si este proceso no termina en los primeros 45 días tienen que liberarlos y darles papeles de residencia y de trabajo”, explicó.
Por otro lado, ocho de los cubanos solicitaron su derecho a salir bajo fianza en los términos de los artículos 50 y 102 de la Ley de Migración, y no les han contestado a la petición, a pesar de haber transcurrido más de una semana.
El caso ha sido denunciado ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos, pero de momento los migrantes no han recibido la visita de ningún miembro de dicho organismo.
El 17 de julio, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) condenó la situación de los indocumentados cubanos en territorio mexicano.
Además la organización criticó la "dejación de responsabilidades por parte del Gobierno de Cuba" y lamentó que los dirigentes de la Isla no protesten por los abusos que sufren los cubanos por parte de las autoridades mexicanas y del crimen organizado.
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