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A menos de 12 horas de la clausura de los Juegos Panamericanos de Lima y con una delegación necesitada de éxitos, el judo cubano rindió una extraordinaria faena en su última fecha competitiva, tras dos medallas de oro y una de plata en un total de cuatro divisiones.
Los supercompletos Idalys Ortiz, en más de 78 kilogramos, y Andy Granda (más de 100) subieron a lo más alto del podio de premiaciones. Actuaciones que se unieron a las conseguidas en jornadas anteriores, que dejaron a la Isla en la cima de la tabla del deporte, por encima del potente Brasil .
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Ortiz, monarca mundial y olímpica, se convirtió en triple reina continental al vencer por ippón (descalificación por penalizaciones) a la boricua Melissa Mojica, dándole la presea dorada número 32 a la comitiva antillana.
De cerrar la cuenta (del judo y de Cuba), se encargó el matancero Andy Granda, quien logró la pena máxima de ippón ante el venezolano Pedro Pineda. Ese fue el 33 y último título de los deportistas cubanos en Perú para asegurar una quinta posición que estuvo asediada por Argentina (32).
Este domingo, además, Kaliema Antomarchi (78) concluyó segunda tras caer ante la brasileña Mayra Aguiar. La santiaguera, bronce mundial en 2017, cayó por ippón en técnica de oro frente al empuje de Aguiar, dos veces bronce olímpica (Londres 2012 y Río de Janeiro 2016) y bicampeona universal.
La víspera, Cuba alcanzó otras dos medallas de oro en judo, con Maylín del Toro primero, en la división de los 63 kilogramos, e Iván Silva luego en los 90, mientras que Jorge Martínez, en los 81, y Onix Cortés (70) terminaron con bronces.
Silva, subcampeón mundial, cumplió esta vez su objetivo al tomar revancha de la derrota sufrida en Toronto 2015. El matancero logró quitarse la espina y finalmente subió a lo más alto del podio después de vencer por ippon en los 90 kilogramos al colombiano Francisco Balanta.
Del Toro, en tanto, se alzó con el título de los 63 kilos, tras vencer por waza-ari a la venezolana Anriquelis Barrios. La santiaguera, dos veces titular en el torneos continentales (Edmonton 2015 y San José 2018), logró hacerse justicia y dejó atrás el bronce de la ciudad canadiense.
En las fechas anteriores (jueves y viernes), se logró el reinado de Magdiel Estrada (73), el subtítulo de Vanesa Godínez (48) y tres terceros escaños (Osniel Solís-66, Roberto Almenares-60 y Nahomy Acosta-52) para que Cuba dominara el judo de Lima, con saldo total de cinco oros, dos platas y cinco bronces.
De esta forma, los cubanos brillaron en la disciplina inventada por Jigoro Kano en el siglo XIX, con actuaciones que resultaron decisivas en la obtención de un quinto escaño que, obviamente, es inferior al cuarto de Toronto 2015, como las 36 de coronas de hace cuatro años y las 33 de Lima.
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