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El periodista independiente Roberto de Jesús Quiñones, sentenciado por los tribunales cubanos a un año de privación de libertad con internamiento bajo un régimen de trabajo “correccional”, ha sido notificado que entrará a prisión una semana antes de lo que le habían informado.
Supuestamente su condena comenzaría el 12 de septiembre, pero el sábado último recibió una citación para que se presentara en el Tribunal Municipal Popular de Guantánamo. Allí le notificaron que este jueves debe presentarse en la cárcel, informa Radio TV Martí.
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“Parece que esa es la entrada definitiva”, aseguró, a la vez que enfatizó que el día 5 de septiembre va a esperar en su casa “porque creo que es demasiado el abuso y demasiado el hostigamiento psicológico que tienen conmigo”.
Quiñones enfrenta esta condena porque en el mes de abril fue a cubrir el juicio contra los pastores Ramón Rigal y Ayda Expósito, condenados también por negarse a que sus hijos reciban la educación pública cubana.
En ese momento varios agentes policiales hicieron uso de la fuerza contra el reportero independiente y se convirtió de víctima en victimario. La acusación que pesa sobre él es “desacato y resistencia”.
Su apelación fue rechazada aunque no descartan la posibilidad de recurrir al Tribunal Supremo. Su abogado ha reconocido que el proceso puede ser amañado pero que agotará todas las opciones posibles.
En entrevista a Cubanet, Quiñones aseguró que él no trabajará en el campamento y que si las autoridades lo desean, lo manden a la prisión provincial, porque él no ha cometido ningún delito.
“La dictadura cubana ha sido la que ha puesto toda la maldad”, señaló.
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